Según las previsiones de primavera publicadas por el Ejecutivo comunitario, la economía de la UE y la de la eurozona se contraerán este año un 4% y un 0,1% en 2010. Este escenario es "sombrío", sobre todo porque el cuarto trimestre del año pasado y el primero de este año han sido "excepcionalmente malos". Pero por primera vez desde mediados de 2007 "han aparecido algunas señalas positivas durante las últimas semanas" que apuntan a "una estabilización de la economía en la segunda mitad del año y una recuperación gradual en 2010", afirmó Almunia.
"Ya no estamos en caída libre. Pero incluso aunque aparecen algunos signos positivos, no tenemos todavía una masa de datos suficiente para decir ahora que estamos fuera de peligro. Espero que podamos decir esto en los próximos meses", resumió el comisario de Asuntos Económicos.
Aseguró que los mercados financieros "se están estabilizando" y que las condiciones de financiación para las empresas también "mejoran". Aunque la situación "todavía es frágil", Almunia se mostró convencido de que las medidas de estímulo fiscal, de política monetaria y de rescate de bancos "darán fruto gradualmente en los próximos trimestres del año".
ACTIVOS TÓXICOS
Las medidas de estímulo adoptadas hasta ahora, sumadas al aumento del gasto por las prestaciones de paro, representan el 5% del PIB de la UE. Además, 19 países de la UE han recapitalizado sus bancos con 300.000 millones de euros y se han concedido avales por valor de 3 billones de euros. Almunia insistió en que ahora es importante que todos los Estados miembros ayuden a los bancos a deshacerse de los activos tóxicos para recuperar la confianza y acelerar la recuperación.
De acuerdo con las previsiones de Bruselas, Chipre será el único país de la UE que logre escapar a la recesión, con un crecimiento del 0,3% este año y del 0,7% el año que viene. La economía alemana retrocederá un 5,4% este año pero volverá a cifras positivas (0,3%) en 2010. Lo mismo ocurre en el caso de Italia (-4,4% y 0,1%) e incluso Reino Unido (-3,8% y 0,1%), mientras que en el caso de Francia la economía caerá en 2009 un 3% y en 2010 un 0,2%.
Dentro de la eurozona, la peor situación corresponde a Irlanda, cuyo PIB se desplomará este año un 9% y un 2,6% al año siguiente. Estas cifras negativas sólo las superarán en 2009 Letonia (-13,1%), Lituania (-11%) y Estonia (10,3%). España retrocederá un 3% este año y un 1% en 2010 y su recuperación será más lenta que la del resto de la UE debido al ajuste en el sector de la vivienda.
Por lo que se refiere a la inflación, Almunia destacó que se registrarán cifras negativas durante algunos trimestres pero enfatizó que se trata de un fenómeno "temporal" porque las expectativas de inflación están ancladas en torno al 2% y los salarios seguirán creciendo. "No esperamos riesgos serios de deflación en la eurozona ni en la UE". La media de este año será del 0,9% para la UE y del 0,4% para la eurozona y en 2010 subirá hasta el 1,3% en la UE y el 1,2% en la eurozona.
El empleo caerá, tanto en la UE como en la eurozona, un 2,6% este año y casi un 1,5% en 2010, lo que se traduce en una pérdida de alrededor de 8,5 millones de puestos de trabajo en los dos años, en contraste con la creación de 9,5 millones durante el periodo 2006-08. Pese a todo, la tasa de paro en 2010 en la UE se situará en el 10,9%, la mitad que en el caso de España.
La crisis disparará el déficit público en la UE desde el 2,3% del PIB en 2008 hasta el 6% este año, y el 7,2% en 2010. Un total de trece de los dieciséis países de la eurozona (todos salvo Chipre, Luxemburgo y Finlandia) superarán este año el límite del 3% de déficit que establece el PEC. Las cifras más espectaculares, además de las de España (8,6% este año y 9,8% en 2010), corresponden a Irlanda, con un déficit del 12% este año y del 15,6% el año que viene. El Ejecutivo comunitario abrirá en los próximos días nuevos expedientes por déficit excesivo contra Malta, Polonia, Rumanía, Lituania y Letonia por haber superado el límite del 3% también en 2008.
El Ejecutivo comunitario considera que los riesgos para estas previsiones están bastante equilibrados. Por un lado, la crisis financiera y la económica podrían retroalimentarse de forma más fuerte que la prevista. Pero por el otro también es posible que los estímulos fiscales y monetarios sean más eficaces a la hora de restablecer la estabilidad y la confianza en los mercados financieros.
EL PARO SE MODERARÁ EN ESPAÑA
Joaquín Almunia también vaticinó hoy una moderación de la destrucción del empleo en España a lo largo del ejercicio, después de las cifras récord registradas en el primer trimestre.
"Es de esperar, y ya hay algunos indicadores en ese sentido, que la situación tienda a moderarse en los siguientes trimestres", explicó Almunia a los periodistas tras presentar las nuevas previsiones económicas de la Comisión Europea.
Según los cálculos de Bruselas, el paro español se situará este año en el 17,3% de la población activa en 2009 y el año que viene escalará hasta el 20,5%, muy por encima del 11,5% de media en la zona del euro y el 10,9% en los Veintisiete.
El ejecutivo de la UE elaboró sus pronósticos antes de la publicación de la última Encuesta de Población Activa -que confirmó que el paro afecta ya a más de 4 millones de trabajadores, el 17,36% del total- y de que el Banco de España informara de la caída histórica del PIB en los primeros tres meses del año.
En opinión de Almunia, las previsiones de Bruselas de evolución del mercado laboral español "son consistentes con la información ya disponible".
El comisario explicó que el ajuste económico en España se está traduciendo en un deterioro muy significativo del mercado de trabajo, "con una caída del empleo muy rápida y un aumento del paro consecuente con esa bajada".
Pero a su juicio, lo previsible es que no siga aumentando el ritmo de descenso del empleo, "y que poco a poco la actividad vaya siendo capaz de absorber el empleo que ha sido destruido hasta ahora".
A la pregunta de si el Gobierno debería adoptar nuevos planes de estímulo fiscal, Almunia advirtió de que las previsiones de déficit para este año (-8,6% del PIB) son "preocupantes" y dejó claro que, aunque a corto plazo hay que usar el gasto público para combatir la crisis, España debe dotarse de una "estrategia de salida" de esa situación deficitaria.
El comisario destacó, en cualquier caso, la cuantía de las medidas de impulso coyuntural puestas en marcha en toda la UE, tanto a nivel nacional como comunitario para este año y el próximo, por un importe total superior al 5% del PIB de los Veintisiete.
Confió en que esa inyección de fondos tendrá "un efecto muy positivo" sobre la demanda, y especialmente sobre el consumo, tanto público como privado.
Almunia consideró que, a la hora de decidir si tiene margen para nuevas medidas, las autoridades españolas deben tener en cuenta el rápido aumento de la deuda pública -Bruselas cree que va a pasar del 39,5% en 2008 al 62,3% en 2010- y que los costes para financiarla irán aumentando.
"A corto plazo hay que utilizar la política presupuestaria para impulsar la economía, porque no hay otros motores", subrayó el comisario, pero insistió en que habrá que volver al saneamiento fiscal, pues "una economía endeudada en sus familias, empresas y sector público no está en condiciones de afrontar un crecimiento sostenible".

