La “troika” (representantes del Fondo Monetario Internacional, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo) ha decidido retrasar el último pago del rescate a Portugal hasta finales de junio para evitar tener que tomar una decisión sobre posible financiación adicional hasta después de las elecciones europeas. Según el programa de rescate, Lisboa habría recibido el último pago el próximo 17 de mayo, justo una semana antes de las elecciones para el Parlamento Europeo.
Este retraso llega mientras Portugal tiene que tomar una decisión sobre su próximo paso. The Wall Street Journal (WSJ) afirma que altos cargos de la Comisión Europea debatieron la semana pasada las opciones para el país luso y que una fuente ha comentado que “la discusión fue un poco liosa”. Encima de la mesa está la posible solicitud de una línea de crédito “cautelar” de Europa para ayudar a Portugal a volver por completo a los mercados financieros.
Una fuente de WSJ ha indicado que Portugal quiere tener la opción de pedir la línea de crédito, aunque al final opte por no solicitarla.
J.M.