Este inicio de 2023 prometía mucho tras un 2022 caótico y de a poco ha dejado a los inversores en ascuas. Un ejemplo de ello es Microsoftque empezó bien el año, pero ha quedado rezagada con respecto a sus pares. No obstante, hay algunos aspectos a tener en cuenta que podrían ayudarle a revalorizarse en bolsa según Bret Kenwell en The Street.
Hasta el 14 de marzo, las acciones del gigante del software subieron un 8.6% este año. Medido contra FAANG, eso está aproximadamente en la mitad del paquete. Comparado con el Nasdaq Composite, Microsoft va a la zaga del rendimiento anual del índice del 9%.
Eso es en medio de los destacados desarrollos relacionados con la IA de la compañía. Microsoft espera que su inversión multimillonaria en la matriz de ChatGPT, OpenAI, ayude a impulsar sus ambiciones. La compañía ya ha mostrado su implementación de IA en su motor de búsqueda, navegador de Internet y productos.
Quizás hoy sea digno de mención, ya que la compañía planea otra demostración de IA.
Más recientemente, el colapso de SVB Financial ha creado un susto en los espacios de tecnología y banca regional (y ahora un susto que se está extendiendo a los bancos europeos).
Eso ha provocado una carrera hacia empresas ricas en efectivo con balances sólidos. Entre esas empresas se encuentran Apple y Microsoft, y hemos visto que las acciones responden a ese catalizador repuntando en los últimos días.
La cotización de Microsoft en las últimas semanas ha sido irregular. Aunque los compradores han intervenido en los últimos dos días, no se puede negar la acción de ida y vuelta.
Las acciones de Microsoft han estado rebotando entre el soporte de 245 dólares y la resistencia de 260 dólares. En el medio están todos los promedios móviles diarios.
Para los inversores, este tipo de acción no es propicio, ya que múltiples pérdidas pequeñas, o "cortar", pueden sumar una gran pérdida cuando todo está dicho y hecho.
La última vez que analizamos las acciones, buscábamos comprar la caída a fines de febrero. Eso fue cerca de 245 dólares de soporte. Desde entonces, las acciones han luchado por tracción en cualquier dirección.
Por el lado positivo, a los alcistas les encantaría ver una ruptura por encima de los 260 dólares. Pero para una confirmación aún más alcista, me gustaría ver que las acciones llenen la brecha cerca de 262 dólares y recuperen el máximo del cuarto trimestre cerca de 264 dólares.
Si la acción superara todos estos niveles, la puerta se abriría nuevamente hacia los 275 dólares.
En el lado negativo, una caída por debajo de 250 dólares despeja el camino hacia el soporte de 245 dólares. Una ruptura de este nivel de soporte, y peor aún, un cierre por debajo de él, podría poner en juego 241 dólares, luego una posible caída hasta 240 dólares.
Microsoft cerraba el miércoles en los 266 dólares con una gran vela alcista y las medias móviles de 70 y 200 periodos se encuentran por debajo de la vela de ayer. Mientras, los indicadores de Ei se muestran en su mayoría alcistas.