Los temores financieros de un individuo se transforman y evolucionan, pero los riesgos a los que debe hacer frente un inversor no lo hacen. Algunos peligros pueden estar más o menos presentes dependiendo de los hechos y condiciones actuales, pero los riesgos subyacentes no varían, opina Chuck Jaffe, de MarketWatch. Como resultado de ello, señala, “es importante que los inversores vean cómo sus preocupaciones se alinean con los distintos tipos de riesgo”:

- El riesgo de mercado, o “riesgo principal”, es la posibilidad de que una recesión (o una mala inversión) se “coma su dinero”. Afecta tanto a bonos como a acciones.

- La inflación, o el “riesgo del poder adquisitivo” es la posibilidad de que usted sea demasiado conservador y su dinero no “crezca” lo suficientemente rápido como para mantener el ritmo de la inflación.

- El riesgo de los tipos de interés generalmente gira en torno a cómo va a cambiar el precio del dinero. Si busca retornos de largo plazo libres de riesgo al poner su dinero en un depósito bancario, se enfrenta a la posibilidad de que los tipos suban y sus activos estén atrapados en una tasa inferior a la media de rentabilidad.

- El déficit de riesgo trata sobre usted personalmente, más que sobre el mercado: es la posibilidad de que no tenga suficiente dinero para alcanzar sus objetivos, tanto si actúa de forma demasiado conservadora como muy agresiva.

- El riesgo derivado de las “situaciones especiales” también versa sobre su vida personal, eventos como la Universidad o una boda, distraen a muchos de ahorrar más para su jubilación, pero estas circunstancias normalmente pasan con el tiempo.

- Un “primo cercano de este último riesgo es el riesgo de timing, o de horizonte temporal, también es un factor muy personal”. Algunos expertos coinciden al afirmar que la probabilidad de ganar dinero con la renta variable a 20 años vista es alta; y a dos años, no es tan clara.

- El riesgo de liquidez se refiere a la posibilidad de las inversiones en un país en particular sufran durante algún tipo de crisis de crédito. También afecta a los valores menos líquidos.

- Los riesgos políticos tienen que ver con que las decisiones de un Gobierno dañen el valor de las inversiones de cada uno.

- Los riesgos sociales son una “imagen enorme” si tenemos en cuenta la gran cantidad de acontecimientos que se producen en el mundo. Pero normalmente tienen que ver con ataques terroristas, guerras o catástrofes.

S.C.