Ya ha empezado el cruce de declaraciones en la víspera de la reunión de los ministros de Finanzas y líderes de bancos centrales del G20, que se celebra este fin de semana en Sidney. Las potencias más desarrolladas han contestado a las emergentes -que habían expresado su angustia por las repercusiones de sus políticas económicas en la economía global- que su función es la de "poner sus casas en orden y asumir el impulso del crecimiento global," según ha informado Reuters.

Esta cumbre llega con el telón de fondo de las recientes fugas de capital de las economías de países como La India, Sudáfrica o Turquía -que son quienes se han visto forzados a subir tipos de interés en 2014- y con sus respectivas divisas cayendo hasta mínimos históricos desde agosto del 2013. Los países emergentes persiguen obtener un compromiso de la Reserva Federal de los EEUU (Fed) para que reequilibre la política de retirada de estímulos a la economía y así se mitigue el impacto en sus economías y mercados financieros.

Según Reuters, EEUU ha liderado la respuesta a estas naciones en un comunicado en el que han expresado que los problemas de los emergentes son, en su mayoría, originados en estos países y que los tipos de interés se deben fijar teniendo en cuenta la recuperación de los mercados domésticos.

A su vez, estas potencias mundiales, entre las que se encontrarían Reino Unido, Japón, Alemania y Australia, se comprometerían a "desarrollar nuevas medidas para aumentar significativamente el crecimiento global, en un entorno global sostenible".

Y éste es uno de los máximos objetivos de esta reunión del G20, en la que el anfitrión de la cita, el tesorero federal de Australia, Joe Hockey, pretende que, entre los países del G20, se coordinen las políticas macroeconómicas como respuesta a la crisis.

Este propuesta también recibiría el apoyo de España, según han informado fuentes oficiales. Una portavoz del ministro de Economía español, Luis de Guindos, confirmó a EFE el respaldo español a la iniciativa australiana.

De Guindos viaja a Australia acompañado por el secretario general del Tesoro, Iñigo Fernández de Mesa, y se espera que mantenga reuniones bilaterales con el viceprimer ministro y ministro de Finanzas de Japón, Taro Aso, y con el viceprimer ministro y ministro de Finanzas de Singapur, Tharman Shanmugaratman, según EFE.

EN LA AGENDA: LA REFORMA DEL FMI, CHINA, "ABENOMICS"…

Con una apretada agenda en la que se espera que se traten muchos temas, se teme que la reciente crisis de los emergentes eclipse otros asuntos, como, por ejemplo, el estancamiento de las reformas en la representación que las economías en desarrollo tienen en el FMI. Muy probablemente, países como China y La India, que han estado liderando la demanda de una reforma de las cuotas de representación y peso en las votaciones de esta institución, pondrán de relieve el hecho de que la decisión sobre esta materia sigue estancada en el Senado de los EEUU.

A este respecto, el máximo representante del Tesoro australiano ha dicho que "no se están tomando las medidas necesarias en el Congreso norteamericano en este asunto". Y ha añadido: "También es perjudicial para los EEUU el que esta reforma de las cuotas de representación en el FMI no se esté llevando a cabo".

Otros temas de los que seguro se hablará será de cómo la amenaza de la deflación global está generando presión sobre las autoridades monetarias para mantener cierta flexibilidad en las políticas económicas en el largo plazo. Ligado a este asunto, saldrá a la luz la insuficiente mejora económica de la Zona Euro. Dice José Luís Martínez Campuzano, Estratega de Citi en España, que también aflorará la eficiencia aunque limitada en medidas del Banco Central Europeo (BCE). Y añade que se debatirá sobre la integración europea y sus riesgos políticos y sociales. En su opinión: "Será complicado alcanzar acuerdos en este tema".

Otro asunto de interés será también revisar cómo de infundados eran los temores de que Japón ganara una injusta ventaja competitiva gracias al "Abenomics" -que había sido el tema principal de anteriores encuentros-. Dice el estratega de Citi que "saldrán a relucir las deficiencias de las políticas económicas niponas y la debilidad del yen".

Por último, aunque habrá otros asuntos, destacar que también se pondrá de relieve la excesiva deuda privada o la gestión de la política económica de China. Tal y como indican expertos de Barclays, uno de los mayores riesgos de 2014 es una posible crisis de liquidez en este país, pero dice Campuzano que "sus autoridades probablemente tratarán de poner más énfasis en los problemas del resto".

Noemí Jansana