Un día antes de la publicación de los datos de inflación para la Zona Euro, su mayor economía ha mostrado una ralentización en la inflación, lo que aumentará la presión sobre la decisión del Banco Central Europeo (BCE) en su reunión de política monetaria este jueves. En concreto, el IPC armonizado de mayo ha registrado un crecimiento interanual del 0,6%, frente al 1,1% previo y en comparación con el 1,0% que esperaba el consenso. La deflación armonizada mensual se ha mantenido en el -0,3%, frente al aumento del 0,1% que anticipaban los analistas.

La inflación general, por su parte, se ha situado en un crecimiento anual del 0,9%, su menor nivel desde junio de 2010, frente al 1,3% anterior y en comparación con el 1,1% que esperaba el consenso. En términos mensuales, el IPC ha caído un 0,1%, frente al descenso del 0,2% que anticipaban analistas y en comparación con la subida del 0,2% esperado por el consenso.

“El hecho de que la inflación es baja aun en la economía más fuerte de la Zona Euro destaca la necesidad de medidas adicionales de política monetaria”, ha comentado Capital Economics tras la publicación de los datos regionales de Alemana. Recordamos que el objetivo de inflación del BCE es el 2,0%.

J.M.