Ayer, el Parlamento de Grecia aprobó, con una clara mayoría, la ley que recoge el amplio paquete de medidas fiscales, bancarias y sobre liberalización de mercado acordadas con la “troika” (Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional y Comisión Europea), los acreedores internacionales de su rescate.
Este paso permite a Atenas obtener préstamos para repagar los 9.300 millones de euros de vencimientos de deuda en mayo, pero deja al Gobierno "prorrescate" de Antonis Samaras en una frágil situación, después de que tres de sus diputados se abstuvieran o votaran en contra de artículos clave de la ley.
Tal y como informa EFE, la aprobación se produjo después de un debate intenso, interrumpido durante un tiempo porque el partido de izquierdas, Syriza, presentó una moción de censura contra el ministro de Finanzas, Yannis Sturnaras.
M.G.