Por nueve votos frente a uno, la Reserva Federal (Fed) ha decidido hoy miércoles continuar con su programa de compra de activos de 85.000 millones de dólares mensuales, aludiendo a una tasa de desempleo elevada y señalando que las política económicas de Washington todavía están frenando el crecimiento.

La decisión del banco central era algo esperado y descontado por el mercado. Aunque la Fed habla de un crecimiento en Estados Unidos “moderado”, añadió que el mercado laboral ha mostrado “un poco de mejoría” y reiteró que quiere ver caer el desempleo hasta una tasa del 6,5% desde la actual del 7,2%.

La inflación, por su parte, sigue por debajo de la meta del banco del 2%, pero la Fed espera que la tasa eventualmente se mueva al alza. Como parte de su razonamiento para seguir con su actual política de compra de activos, la Fed se ha referido, por primera vez en un tiempo, a la evidencia de que el resurgimiento del sector de la vivienda se ha “ralentizado un poco”. Añadió que planea “esperar más evidencias de que se mantendrá el progreso antes de ajustar el ritmo de compras”.

N.A.