El Banco Central Europeo (BCE) acaba de comunicar que mantiene los tipos en el 0,25%, una decisión sobre la que no había consenso claro, ya que la baja inflación podría haber incitado a la autoridad monetaria del Viejo Continente a elevar el precio del dinero. Asimismo, otra de las medidas especuladas, la rebaja a tasas negativas del tipo sobre depósitos, tampoco se ha producido. Se mantiene en el 0%.

Una de las acciones que podría anunciar el presidente, Mario Draghi, a partir de las 14:30 horas, en rueda de prensa, sería eliminar la esterilización del SMP (Securities Markets Programme o compras de deuda soberana en el mercado secundario), esto es, volver a poner en el mercado el dinero que imprimió para comprar bonos soberanos en los momentos más duros de la crisis de deuda en Europa. Esto contrarrestaría la devolución de los LTROs con el fin de poner más crédito en el mercado. “No se puede excluir el paso simbólico que supondría poner fin a la esterilización el SMP, con el fin de paliar el menguante exceso de liquidez, aunque el BCE podría querer mantener esta herramienta en el bolsillo”, opinan en Credit Suisse. “Esta herramienta no se traslada a crédito de forma inmediata”, apuntaba hace unos días Alberto Matellán, director de estrategia y análisis de Inverseguros en el boletín que escribe en El Diario del Seguro.

Otra opción, menos probable, sería la compra de activos, a saber, adquirir a los bancos comerciales de Europa paquetes de préstamos. Son los ABS. Si el BCE los compra, facilita que la banca conceda préstamos.

“Esperamos que el BCE revise a la baja sus previsiones de inflación para este año y el que viene”, prevé Credit Suisse, y concluye: “Pensamos que en 2016, la inflación se mantendrá por debajo del objetivo de estabilidad de precios. El BCE mantendrá también su forward guidance de 'tipos en los niveles actuales o más bajos'. Pero la previsión de inflación para 2016 es probablemente lo suficientemente elevada como para alejar una QE (compra de activos al estilo de la Fed de Estados Unidos -quantitative easing) del BCE”.

María Gómez