Hoy es un día importante en los mercados, porque la Reserva Federal (Fed), el banco central más poderoso del mundo, publicará su comunicado sobre política monetaria. Sin embargo, como explican los analistas de Santander Private Banking, “la reunión del Federal Open Market Comittee (FOMC, el comité ejecutivo) ha perdido algo de lustre, en la medida en que, debido al apagón gubernamental, no se han publicado un buen número de registros macroeconómicos, lo que redundará en una reunión de poca transcendencia. Así, no esperamos modificaciones sustanciales en el mensaje de política monetaria de la Fed”.

De la misma manera opina el consenso de analistas, aunque también hay voces discordantes. Es el caso del consejero delegado de BlackRock (uno de los fondos de inversión más importantes del mundo), Larry Fink. “Es imperativo que la Reserva Federal comience el tapering (retirada de estímulos)”, comentó el lunes en una intervención pública. “Hemos visto verdaderos mercados burbuja antes. Hemos tenido un gran mercado alcista en la renta variable y hemos visto a los diferenciales de deuda corporativa estrecharse dramáticamente. Nuevamente, tenemos los problemas de un mercado demasiado entusiasta”, ha añadido Fink.

Es tal la confianza que el mercado tiene en que la Fed no variará su política monetaria a corto plazo, que el S&P 500 ha marcado tres máximos históricos consecutivos antes de la reunión, algo totalmente inusual. “Normalmente, hay bastante cautela antes de la reunión de la Fed, pero estamos en un mercado totalmente optimista, que prevé un mensaje dovish (pro-estímulos) por parte de la Fed”, ha explicado a CNBC Quincy Krosby, estratega de mercados de Prudential Financial.

Y es que el consenso de analistas ha cambiado radicalmente sus previsiones y ahora no espera que la Fed retire sus estímulos monetarios hasta 2014. Muchos expertos afirman que el banco central no variará su política de compra de activos hasta que Janet Yellen sea la nueva presidenta, a partir de febrero del año que viene. En este sentido, Charles Evans, presidente de la Fed de Chicago, comentó hace un par de semanas que la crisis fiscal de las últimas semanas retrasará el tapering durante varios meses. “Creo que necesitamos un par de buenos informes de empleo y evidencias de un mayor crecimiento del PIB. Es probable que cueste unos pocos meses conseguirlo”, señaló.

“QE INFINITA”

Sobre este tema, Marc Faber, inversor y analista muy reconocido en Wall Street, ha vuelto a dejar su “sello personal”. En lugar de esperar una reducción de las compras de activos (QE3) por parte de la Fed, espera que el banco central las aumente. “La cuestión no es el tapering. La cuestión es en qué proporción aumentarán las compras de activos, hasta 150.000, 200.000 o un billón de dólares al mes”, ha explicado.

En su opinión, la QE3 se convertirá en QE “infinita” porque “todos los programas del Gobierno que son introducidos de urgencia como medidas temporales siempre acaban siendo permanentes. La Fed se ha situado a sí misma en una posición en la que no hay una estrategia de salida”.

QETERNITY

Capital Economics titula su último informe Fed Watch QEternity?. “Lo más probable”, afirman estos expertos, “es que el tapering se retrase hasta marzo, aunque la incertidumbre fiscal puede forzar a la Fed a posponerlo a más largo plazo. Por otro lado, los costes crecientes de la QE tampoco pueden ser dejados de lado”.

Añade esta firma que “las dos semanas de shutdown harán que la Fed mantenga sin cambios sus compras de activos en su reunión que concluye el 30 de octubre. Debido a la debilidad del Informe de Empleo de septiembre, creemos que también está fuera de la mesa un recorte en diciembre (en realidad, hay posibilidades de que algunos miembros de la Fed pidan aumentar la QE3). Pensamos que marzo es la fecha más probable para iniciar el tapering, pero la incertidumbre fiscal puede posponer aún más a largo plazo cualquier decisión”.

También consideran que “la Fed puede haber perdido su ventana de oportunidad. Si está esperando menos incertidumbre fiscal, esto puede convertirse en la QEternity. Puede llegar un momento en el que la Fed se vea obligada a retirar sus estímulos incluso si la economía no mejora, lo que puede ser una desagradable sorpresa para los mercados financieros”.

Capital Economics anticipa que la incertidumbre sobre el techo de la deuda volverá al mercado “en febrero. Aunque confiamos en un nuevo acuerdo de último minuto, la incertidumbre aumentará y tal vez marzo no sea el momento oportuno para iniciar el tapering, sino abril o junio”.

BARCLAYS CAPITAL

Estos expertos afirman que “ahora esperamos que la Fed comience a reducir sus compras de activos en marzo de 2014, en vez de en diciembre de 2013. Esperamos que la QE3 finalice en septiembre de 2014, en vez de en junio. La principal razón es la debilidad en los últimos datos laborales”.

Estos expertos destacan un aspecto importante. “La reciente caída en la tasa de participación en el mercado laboral (labor force participation rate – LFPR) no será contrarrestada. La evolución de la LPFR es clave a la hora de juzgar cuánto crecimiento del empleo es necesario para bajar la tasa de paro. En nuestra opinión, creación de empleo de 75.000-100.000 será suficiente”. Anteriormente, el consenso consideraba necesaria una creación de empleo de 200.000 puestos de trabajo para rebajar la tasa de paro.

En este sentido, la Fed y Janet Yellen se fijarán más en la creación de empleo que en la tasa de paro. “Es probable que su idea de un mercado laboral sólido sea una creación de unos 200.000 empleos al mes”, afirman desde Barclays.

César Pérez-Obanos