Con resultados que han dejado perplejo a más de un inversor por batir records, esta temporada de resultados, que va llegando a su fin, dejará atrás el optimismo sobre el crecimiento económico, las ganancias corporativas y la disposición de los inversores para capturar las tendencias, según indican desde Bank of América (BofA).
En su última encuesta de administradores de fondos globales, los estrategas de Bank of America Global Research encontraron que varios indicadores del ciclo económico retrocedieron en abril después de haber aumentado considerablemente durante la primavera.
“Y aunque todas estas medidas siguen siendo altas según los estándares históricos, en el contexto de los estrategas que piden que el crecimiento económico alcance su punto máximo y los múltiplos de ganancias se contraigan, las señales comienzan a acumularse en el sentido de que vamos a un nuevo ritmo en esta recuperación. Un engranaje en el que menos personas están seguras de todo va a mejorar a partir de aquí”, indica Udland.
El primer gráfico de la nota de BofA que destacaba que el porcentaje neto de inversores que esperaban una economía más fuerte en los próximos 12 meses cayó al 84% en mayo desde el 90% del mes pasado. El porcentaje neto es la diferencia entre quienes piensan que la economía será más fuerte y quienes piensan que la economía será más débil en un año.
Y aunque esta medida todavía está claramente elevada según los estándares históricos, lo que muestran estos datos es otro cambio en la tasa de cambio esperada en la economía. Se espera que el crecimiento continúe, sí, pero probablemente a un ritmo más lento que el actual.
En cuanto a las ganancias corporativas, los encuestados de BofA ven la situación de manera similar a la economía en general, con un 78% neto de encuestados que esperan un crecimiento global de las ganancias durante el próximo año. Pero al igual que las expectativas de crecimiento, esto también es 6 puntos porcentuales por debajo de la lectura del mes anterior del 84%.
Tomemos estas lecturas juntas y podremos ver por qué la encuesta también muestra que los inversores se retiran de asumir niveles anormalmente altos de riesgo en sus carteras después de que el apetito por el riesgo alcanzara un récord en la encuesta de administradores de fondos de febrero.