Amazon nos se mueve en el mercado en lo que va de año en Wall Street, mientras Alibaba gana por encima de un 100% en el mismo periodo de 2025. La diferencia no radica en los ingresos o el beneficio por acción, que lo hay entre ambas compañías, sino que se encuentra en la gran megatendencia que ahora mismo parece movérlo todo en Wall Street, aunque no solo allí.
Hablamos de la IA, la inteligencia artificial generativa de la que Alibaba ha sabido aprovecharse en lo que va de año para reactivar una cotización bursátil de la que la compañía que fundó Jeff Bezos, nos se ha aprovechado en gran cantidad, al menor todavía.
Estas son sus expectativas al más corto plazo para ambas compañías.
La temporada de resultados tendrá mayor recorrido para el supergigante chino, ya que no se confiesa ante el mercado hasta el 21 de noviembre. Pero lo que de verdad está moviendo al valor en lo que llevamos de año, es, por un lado, la menos intromisión de las autoridades chinas y sus penalizaciones para la empresa y, por el otro, sus implementaciones realizadas en inteligencia artificial, el factor que de verdad pondera ahora mismo entre los inversores.
Es, sin duda, la guía más importante porque aquellos que compran sus acciones consideran que el desarrollo futuro de esta tecnología aplicada a sus negocios multiplicará exponencialmente su cotización en los próximos años. En especial en dos áreas en las que es claramente un líder asiático en el sector, tanto el comercio electrónico como la nube.
Por ejemplo, el crecimiento en esta última área supera el 26% interanual, con mayor aceleración en GenAI, como se llama en inglés la inteligencia artificial generativa, pero también en la infraestructura en la nube de China. Dos factores lo potenciarán, en ambos casos: por el impulso del tráfico de usuarios y apoyado en el incremento de los ingresos por publicidad a largo plazo.
Relacionado con esto otro de los ejes fundamentales son las inversiones empresariales megamillonarias que las empresas realizan en la infraestructura de la IA. Y Alibaba se ha sumado con el anuncio de su CEO, Eddie Wu, de más inversiones de las previstas, tras los 53.000 millones anunciados en gasto de inteligencia artificial. Y todo para ponerse al día de las cifras estratosféricas anunciadas por OpenIA.
Una ampliación de ese montante, que se ha encargado en buena parte de mantener y potenciar su cotización, a la que se sumará el interés de los grandes inversores que ya se está viendo: Cathie Woods la gran gurú tech, que acaba de elevar su tenencia de acciones de Alibaba en más de 11,4 millones de dólares de una sola tacada, con la adquisición de casi 69.000 acciones en octubre.
La compañía fundada por Jeff Bezos y dirigida por Andy Jassy se confiesa con el mercado el próximo día 30. Entre lo que la empresa estableció en sus guías, encontramos ingresos de 177.670 millones de dólares y un beneficio por acción de 1,57 dólares, por debajo del registrado en el trimestre anterior.
La compañía de comercio electrónico y en la nube anticipaba en el segundo trimestre que las ventas netas se situarían entre 174.000 millones y 179.500 millones de dólares, con un crecimiento de entre el 10% y el 13% en comparación con el tercer trimestre de 2024.
Esta orientación espera un impacto favorable de aproximadamente 130 puntos básicos (pb) de los tipos de cambio.
Además esperaba que los ingresos operativos se colocaran en una horquilla entre los 15.500 millones y los 20.500 millones, en comparación con los 17.400 millones del tercer trimestre de 2024.
Pero hay dos factores fundamentales que el mercado no va a dejar pasar: sus inversiones y acuerdos relacionados con la IA y el fallo global de la nube, su AWS, que dejó impactado al mercado global la semana pasada, pero que apenas tuvo efecto en su cotización, salvo en el caso del universo cripto.
En el primer caso pondrán sobre la mesa, respecto a la GenAI, la herramienta "Ayúdame a Decidir" (Help Me Decide) que se lanzaba una semana después de que su principal rival, Walmart, anunciara su colaboración con OpenAI. Está diseñado para funcionar junto con otras herramientas de compra basadas en IA, como el chatbot Rufus, que responde a las preguntas de los clientes y puede obtener información sobre los productos.
Y en el segundo, más allá de las explicaciones, que tendrán su impacto en las cifras del último trimestre del año, los progresos en estas tres fases de la estrategia sobre la IA serán fundamentales para los inversores. Sus avances en infraestructura, es decir, en el desarrollo de centros de datos y chips, en los modelos de lenguaje de gran tamaño, los denominados LLMs y en materia de software.
Recordemos además que hablamos con AWS del gran contribuidor de la tarta de ingresos de Amazon, ya que, en el último trimestre, supuso el 57% de las ventas totales de la compañía.
A esto se una la buena lectura que siempre hace el mercado del recorte de gastos. Amazon acaba de anunciar despidos masivos de 14.000 de su área corporativa aunque se ha hablado de superar la cifra de finales de 2022 que llegó a 27.000, hasta los 30.000, que sería el mayor recorte de su plantilla en toda su historia, si finalmente se confirma.
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