El daño de la renta variable se ha visto también reflejado en la deuda pública, ya que tenemos una estructura de eta año pues es subida de tipos en toda la periferia mientras en el resto hay bajadas. España sube los tipos hasta el 1,83% mientras Italia sube al 1,9% al mismo tiempo que Alemania desciende hasta el 0,56% y Francia al 0,86%.

Total, el miedo y la incertidumbre a la situación de que dos países afectados por la crisis, por los recortes, han tenido elecciones y los dos han buscado alternativas, ha hecho temer por la continuidad de las medidas económicas del gobierno actual, pero mucho de lo que se espera de España depende del resultado final de la situación en Grecia, porque abriría una puerta al entendimiento o la cerraría definitivamente con el resto de socios.

Grecia es el telón de fondo que se toma como exponente de lo que se puede esperar en otros países que han buscado alternativas políticas. En este momento la deuda a diez años de Grecia sigue nerviosa subiendo al 11,58%, todavía no en pánico que sería ir otra vez por encima del 13%, pero también lejos de la estabilidad que supone rondar el 10% o menos.

Nos hemos dado la vuelta un en cuanto han aparecido comentarios muy positivos sobre la situación de Grecia en el sentido de que un portavoz de la comisión europea ha dicho que hoy se va a reunir el grupo de trabajo de Bruselas para buscar de forma activa una solución al problema y además el ministro de economía de Grecia ha dicho que van a pagar al Fondo Monetario Internacional el 5 de junio porque para entonces habrá un acuerdo.

El que Grecia pueda seguir adelante y haya una solución abre la puerta a que se especule con que por mucho lío que haya en España, siempre habrá una vía de acuerdo, lo que sería estupendo para los inversores, un pero la incertidumbre es realmente alta porque no sabemos qué tipo de pactos habrá y sobre todo lo que pueda pasar en las elecciones generales a finales de año, así que la situación se ha convertido más en un campo de minas a base de titulares que Irán saliendo poco a poco en los próximos seis meses, no sólo por la parte política sino también por las consecuencias de las acciones de gestión que lleven a cabo los nuevos partidos en el nuevo mapa político, pues se irá tomando nota de ello para ver qué se puede esperar después de las elecciones generales.

Por lo tanto, las noticias de Grecia nos han sacado de los mínimos de la sesión y están haciendo que el futuro del Ibex 35 se ponga en positivo.

El otro factor, que ayuda a Europa especialmente, es que el dólar sigue fortaleciéndose, cerca del 0,9% contra el yen, lo que sigue dando cuerda a esas declaraciones de la Presidenta de la reserva federal que dicen que en 2015 habrá subida de tipos, pero depende de los datos el saber cuándo. Al arrojar esta certidumbre, el dólar se ha puesto a revalorizarse en prácticamente todas partes, lo que era extraordinariamente necesario para que ese retroceso desde la zona de resistencia del 1,15 generase más retroceso y pusiese un buen telón de fondo favorable a la divisa que ayudase a las exportadoras europeas y en concreto al índice alemán.