Javier Molina, especialista en Activos Digitales reconoce que “una de las aplicaciones de la tecnología de la cadena de bloques puede verse perfectamente en el ámbito sanitario. Desde la construcción de un sistema que permita compartir información del paciente entre centros médicos de todo el mundo, de forma inmediata, segura y descentralizada hasta sistemas de trazabilidad de fármacos o dotar a los médicos de sistemas para controlar el consumo de los pacientes, son muchos y variados los casos de uso a desarrollar”. 

Sobre la unión de identidad digital y salud,  Montse Guardia, Directora General de Alastria reconoce que “si queremos tener un control de nuestra salud tenemos que ser conscientes de estos datos en salud digital y nuestra identidad nos define en nuestra existencia como datos de salud”. A juicio de esta experta, la identidad debería ser el primer paso para recibir un diagnóstico, trabajar con seguridad y ser conscientes de que el dato lo tenemos solo para nosotros. La confluencia entre la identidad digital y el blockchain permite que “descentralizadamente estemos construyendo la verificación de la identidad digital, una prueba de existencia real en la red que con esta arquitectura podemos tener. (…). Es mucho más seguro que la Ley de protección de datos y la tecnología está evolucionado para permitirnos hacer esto”. 

Sin embargo, este cambio de paradigma – social, sobre todo -  es precisamente una de las barreras con las que se encuentra el sector. “A la gente que no tiene conocimiento amplio de qué es blockchain y sus usos, demostrarle que esta tecnología asegurará su privacidad, que no podrá acceder cualquiera a su información y todo lo que aporta no es fácil de vender. Esa ha sido nuestra principal barrera porque hay mucha gente que no quiere dar su información solo por el hecho de que no quiere que nadie acceda a la misma”, dice Carlos Girón, CTO de Atrys Health.

Sin embargo, los usos presentes y potenciales de la cadena de bloques en el sector salud son numerosos. Por un lado, esta tecnología permite tener una trazabilidad de medicamentos. Entendido como el vehículo que garantiza un abastecimiento adecuado, asegura el seguimiento integral de estos productos con vistas a efectuar acciones rápidas de farmacovigilancia, así como para salvaguardar los requerimientos que, en materia de seguridad y salud1, se exigen a las especialidades farmacéuticas. Andrés Garrido, profesor del programa especializado de Blockchain e Innovación Tecnológica de IEB reconoce que es una solución que se usa a día de hoy para tener la trazabilidad completa de todos los componentes que tiene un medicamento que se consume o se receta desde los hospitales y clínicas privadas. “Se mira que no se rompa la cadena de frio, hay pruebas de entrega y recogida y no se llevan a cabo manipulaciones de los productos hasta que llegan al cliente final. Además, se está haciendo una parte de desarrollo de innovación que es entrega directa a pacientes en sus domicilios”. 

Ahí cuando se habla de distribución en temas sanitarios y de medicamentos hay muchos usos, reconoce este experto, desde grandes farmas que trabajan en conjunto para garantizar la autenticidad del medicamento que se distribuye. Ahora, con la vacuna del Covid- 19 “se comprueban cadenas de frio, cumplimientos y la Administración  pone mucho el foco en la distribuidora que reparte las vacunas en las distintas consejerías de salud según las proporciones. Hay muchas aplicaciones de la tecnología únicamente  cuando hablamos de distribución y transporte: medicamentos, vacunas…etc”. 

Pero además está la telemedicina y telediagnosis. Desde Atrys aseguran  que el blockchain permite tener una historia clínica inalterable y consultable  que se pueda insertar en una cadena de bloques para que un médico tenga toda la información de un paciente y poder tratarle. Además,  ha habido  varias iniciativas que se plantearon con el tema del Covid como aplicaciones que permitían hacer un seguimiento de los individuos y, con el blockchain, hacer una trazabilidad que nos mostrase los puntos de relación entre humanos para comprobar propagaciones posibles. “En caso de hacer un positivo se podía hacer una traza de cuáles habían sido los puntos de indexación de personas”. 

Si quieres aprender a operar en Bitcoin y otras criptomonedas apúntate a este curso