Este lunes es clave para Esther Kopolowitz, ya que la directiva tendría que llegar a un acuerdo in extremis
con los bancos acreedores de su deuda personal. No obstante, parece que BBVA y Bankia están abiertos a alargar el vencimiento del préstamo hasta 2019. En caso de no llegar a un acuerdo, podrían ejecutar la deuda de la sociedad B-1998 y quedarse con el 50,01% de FCC.
Además, también llevaría al traste la ampliación de capital que la constructora prevé cerrar antes de final de año por valor de 1.400 millones de euros y que posibilitaría a la compañía amortizar parte de los más de 4.500 millones de deuda que refinanció. Aun así, esta ampliación volvería a poner en la palestra la participación de Esther Koplowitz, pues si al vencimiento en 2018 se incurriera en el pago del tramo de deuda convertible tipo B, los bancos acreedores del crédito sindicado ejecutarían el 50,1% del capital. Además, hay que contemplar que esta ampliación supondrá una enorme dilución para los antiguos accionistas, pues actualmente FCC capitaliza 1.843 millones y la ampliación se llevaría a cabo por valor de un 73% del capital.
Entre tanto, FCC y Bankia ultiman los procesos de venta de las dos sociedades que controlan conjuntamente, la inmobiliaria Realia y el grupo de concesiones de infraestructuras Globalvia.
Hoy, sin duda, la casa FCC está revuelta, aunque los accionistas tampoco le dan mucha importancia a estos acontecimientos, quizás porque se descuenta que BBVA y Bankia van a llegar a un acuerdo sí o sí con Esther Koplowitz. El caso es que las acciones de la constructora ceden medio punto porcentual hasta los 14,40 euros. El movimiento lleva a la acción a tantear el soporte de los 14,50 euros, mínimos de marzo. Por debajo FCC podría regresar a mínimos del año, en 13,03 euros. Por arriba, sería de vital importancia que el título atacara los 16 euros y, posteriormente, rompiera con la directriz bajista que pasa por los 16,50. El MACD está a punto de cortar a la baja por debajo de la línea 0, lo que daría una señal de venta.
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