Ustedes han impartido este año el programa de educación financiera para adultos. ¿Cree que falta cultura financiera en nuestro país?
Una vez hecho el programa de educación financiera en EFPA, sí que hemos detectado la necesidad de programas de educación financiera dirigidos a adultos. De hecho, desde el Instituto de Estudios Financieros en 2009 también hicimos una encuesta entre jóvenes universitarios de la que sacamos dos conclusiones: que sabían poco y que querían saber más.

También tenemos experiencia en programas de educación financiera para jóvenes en escuelas y es bastante sorprendente que los profesores tomen apuntes en las aulas y se esperen hasta el final de la sesiones para hablar con los voluntarios.

También hay otros estudios que confirman que la educación financiera en adultos es necesaria y también desconocida, lo que es lógico porque no nos han explicado educación financiera en las escuelas.

¿Han notado una mayor demanda de educación financiera desde el inicio de la crisis?
La educación financiera está en auge. Hay planes nacionales en varios países, lo que hace que esté de moda. Además, nosotros también notamos que cada vez hay más colectivos que están más interesados en la educación financiera en general y en temas concretos.

¿Cuál es la parte que suscita más interés a los asistentes? Ahorro, jubilación, complementos para la jubilación…
Los talleres que se desarrollan dentro del proyecto EFPA se basan en la analogía con un gran viaje y, en estos talleres, vemos que suscita gran interés qué es un fondo de emergencia, la necesidad de tener uno para imprevistos… y se quedan sorprendidos cuando calculan el importe que van a necesitar para completar su jubilación o pensión. Las herramientas que se utilizan y los productos de inversión también suscitan interés.

Jordi Martínez, es director del programa de educación financiera IEF y asociado de EFPA