Con gran parte de los mercados en terreno de corrección, sobre todo en EEUU, ¿qué previsiones tienen para la segunda parte del año en los mercados de renta variable?

En principio no son del todo alentadoras, porque cuando se apliquen las medidas de subidas de tipos y el resto de las mismas que puedan reducir la inflación y volver a terrenos normales, esperamos que haya unos ajustes, que la renta fija podría incluso corregir y poder recortar el terreno que había cedido. Podemos ver que en ciertos sectores de renta variable, como puede ser el tecnológico o todos aquellos que no son defensivos, sí que pueden ceder terreno y aunque no sabemos el impacto total se estima que puede ceder incluso un 10 o 20%. 

¿Cuáles cree que serán las señales de que los mercados han tocado fondo?

En principio la mejoría de los datos macro pueden ser un síntoma que puede hacernos ver que las medidas han sido efectivas o no, y en torno a estas publicaciones es muy probable que se vaya viendo trimestre a trimestres cuales han sido las mejoras en los sectores que han sido ciertamente tensionados, energético, financiero o aquellos que son de riesgo.

¿Cree que el sector bancario es un buen activo en el que jugar la subida de tipos en la Eurozona?

Sí que es buen sector debido al entorno en el que nos encontramos, con una subida de tipos, que viene a ser el negocio tradicional de la banca. Habría que ver cual es el apetito de aversión por el riesgo debido a que podemos ver el sector financiero arrastrado por este momento recesivo, pero sí que es verdad en el caso español hemos visto unos fuertes crecimientos en ciertos bancos y esto ha hecho que ciertos inversores hayan mirado con gusto al sector, que podría ser uno de los grandes beneficiados de cara a esta subida de tipos y a esta situación que tenemos de aquí a los próximos 12-18 meses, que será en principio el período en el que veamos cual es el desarrollo de este proceso de subida de tipos tanto en EEUU como en el Viejo Continente en el cual veremos impacto de los mismos en el mercado.

¿Cómo valora el impacto que pueda tener sobre el sector energético el impuesto anunciado por el gobierno sobre el sector?

No suelo ser muy positivo debido a que al final es muy probable que se transmita a los clientes, que al final suelen ser quienes sufren estos impuestos o subidas, y esto no suele ser del todo positivo de cara a que veamos un mercado libre y que no esté muy pactado.

¿Cuál es su opinión sobre el mercado español?

El mercado español ha visto caídas más fuertes que en el resto, pero siempre hemos defendido zonas de suelos que en principio ha dado cierta confianza al inversor. Esto puede ser también por el sector financiero o el sector servicios que también ha tenido un peso importante en el índice. Hemos visto como el mercado descuenta que en el momento en que haya una plena recuperación y volvamos a un estado de normalidad en una economía en la que no tengamos muchos sobresaltos, esperamos poder ver crecimientos incluso de doble dígito en ciertos sectores como ya hemos visto desde los mínimos que habíamos marcado. Estamos viendo como el mercado incluso europeo puede confiar en que podamos ver unas subidas fuertes en el momento en que haya apetito por el riesgo y el mercado se sienta cómodo para adoptar riesgo. 

¿Qué activos cree que lo pueden hacer mejor en este entorno de inflación al alza y subidas de tipos?

En los ciclos económicos como el que nos movemos, en un potencial fase recesiva, habrá que irse a sectores más defensivos y esto hace que tengamos que ver áreas que habíamos denostado previamente pero que en estos momentos los inversores se tendrán que refugiar para poder obtener retornos y proteger las carteras.

Criptoactivos, ¿qué actitud habría que tener como inversores?

Estamos viendo una falta de confianza. Hemos visto también problemas en uno de los mayores fondos de criptoactivos en EEUU y esto hace que no esté pasando por los mejores momentos. Pero, sin embargo, sí que puede haber potenciales retornos. En cualquier caso, de momento es un activo muy volátil y del que habría que estar alejado en el caso de ser un inversor que no tenga apetito por el riesgo.