El precio de la gasolina es el factor determinante a la hora de formar las expectativas inflacionistas, explica José Luis Cava, de tal manera que cuando sube el precio de la gasolina, “los consumidores pensamos que la inflación se va a incrementar en el próximo futuro”.  

El problema que nos encontramos ahora mismo es que el precio de la gasolina, continúa el analista, “se ha movido lateralmente desde el año 2022 por debajo de la resistencia en la zona de 65”. Y ahora nos encontramos que, por primera vez desde agosto de 2022, el precio de la gasolina ha superado la resistencia de la zona 65, “una resistencia muy importante que lleva funcionando casi durante 11 meses, lo ha roto con fuerza y da la sensación de que va a intentar dirigirse a la zona de 80, es decir que su tendencia alcista va a continuar en el próximo futuro”.  

El experto aclara que el gráfico mostrado no es el del futuro sobre la gasolina, “sino que es la cotización de un ETF que invierte en futuros sobre gasolina en Estados Unidos. Hemos preferido utilizar este gráfico porque representa mejor el comportamiento de la gasolina que si hubiésemos recurrido a los gráficos de los futuros sobre la gasolina”.  

Cava continúa explicando que, si ahora nos encontramos que sube el precio de la gasolina y se incrementa las expectativas inflacionistas, la Fed va a tener que intervenir, “y esto puede alterar las expectativas de subida de tipo de interés que está descontando el mercado”. Además, debemos tener en cuenta, señala, que el incremento del precio de la gasolina se está produciendo en un momento en el que el mercado laboral todavía está fuerte, lo cual hace más probable que la Fed mantenga los tipos altos durante más tiempo.  

Y por lo que hace referencia a las bolsas, el experto apunta que “debemos tener en cuenta que toda la subida de la bolsa se ha apoyado fundamentalmente en las expectativas de recortes de tipo de interés para finales de año. También debemos tener en cuenta que si el precio de la gasolina sube, ejerce un efecto contractivo sobre la economía. Si este precio de la gasolina sube e induce a la Fed a mantener los tipos de interés altos, o elevarlos un poco más, va a hacer más probable que se produzca un efecto contractivo muy importante en la economía de Estados Unidos, y por lo tanto que el aterrizaje no sea suave sino que sea brusco”.  

En este sentido, el analista explica que el consenso de mercado espera un aterrizaje suave. “Luego ya ven ustedes que cuando lo espera todo el mundo, probablemente no se dé”.  

En cuanto al S&P 500, Cava observa que tiene un soporte en la zona 4.533-4.528, soporte que ha sido respetado. “Nosotros creemos que mientras el S&P 500 se mantenga por encima 4.528, predisposición alcista, y estamos pensando en un objetivo zona 4.620”.  El índice se paró al llegar al 4.593. “Nosotros creemos que, para los próximos días, lo más probable es que el S&P 500 se mueva entre 4.593 y 4.528. Que dibuje un movimiento lateral antes de desplegar un nuevo tramo al alza”.  

El experto también apunta que existe un soporte en la zona 4.570. “Si hoy no fuese perforado y el S&P 500 fuese de capaz de superar el 4.593, muy probablemente hoy desplegaría una nueva onda alza, y nosotros vamos a estar atentos por si eso se produce  para abrir una leve posición larga con la intención de vender en la zona 4.610-4.620”, concluye.