El presidente ruso, Vladimir Putin, reconoció a las dos autoproclamadas repúblicas separatistas y mandó tropas en dos regiones respaldadas por Moscú en el este de Ucrania después de anunciar que reconocería su independencia, una medida que varias naciones condenaron como una violación del derecho internacional y la soberanía de Ucrania. 

EE UU está listo para anunciar más sanciones contra Rusia y cancelar el comercio con las dos regiones de Ucrania. 

Además del tema de Rusia que ya de por sí es preocupante, tenemos los precios de las energías disparados. El petróleo, que estaba pendiente del acuerdo con Irán sigue al alza y sube hasta un nuevo máximo de 7 años por los temores de que un gran conflicto pueda interrumpir el suministro, lo que se suma a las preocupaciones de nuevas presiones inflacionarias. 

Los futuros de gas de Europa, se disparan más del 8% a alrededor de 80 € por megavatio-hora ante las señales de una mayor confrontación.

Europa se ha vuelto cada vez más dependiente del gas ruso para la generación de electricidad, las aplicaciones industriales y el uso comercial y residencial, importando más del 80% del gas natural que utilizaron en 2020, frente al 65% de la década anterior.

A pesar de que se aleja hoy de los mínimos de la sesión, lo cierto es que ha perdido el soporte clave de los 14 810 puntos, lo que activa un objetivo teórico por ruptura de rango lateral hacia en entorno de los 13 330 puntos ni más ni menos.

En este contexto, rebotes que puedan venir a corto plazo podrían ser aprovechados como oportunidades para reducir exposición al mercado alemán, ahora la primera resistencia es el soporte anterior 14 810, en caso de sobrepasarla tenemos otra relativamente cerca en los 15 142 puntos, pero a partir de ahí se antoja complicado pensar que lo pueda superar.

Los primeros niveles bajistas que ahora nos marca el gráfico son 13 986,4 puntos y si lo pierde tendríamos los 13 330 que ahora es un escenario más probable que termine cumpliendo en los próximos días o semanas.

El motivo del rebote viene de los datos macro publicados. El índice Ifo saltó a 98,9 en febrero de 2022, el más alto en cinco meses, desde un 96 revisado al alza en enero y superando la previsión del mercado de 96,5. 

Tanto las condiciones actuales (98,6 frente a 96,2) como las expectativas (99,2 frente a 95,8) mejoraron considerablemente, pero los cuellos de botella siguen siendo un problema. 

Las expectativas de precios en los sectores de la industria y el comercio minorista han aumentado y también aumentó el número de empresas que quieren subir sus precios, lo que presionará al alza a la inflación.

La economía alemana espera el final de la crisis del coronavirus, aunque el aumento de los precios de la energía como resultado de las tensiones en Europa sin duda será un lastre para los negocios. Además, los resultados de febrero no se vieron influenciados por la crisis en Ucrania, que sigue siendo un claro factor de riesgo.

¿Qué nos dice el posicionamiento de los clientes de IG?

Los datos de comerciantes minoristas muestran que el 67,76 % de los comerciantes están netos en largo con una proporción de comerciantes largos a cortos de 2,10 a 1. El número de comerciantes netos en largo es un 24,29 % más alto que ayer y un 17,71 % más alto que la semana pasada, mientras que el número de traders netos cortos es un 9,25% inferior al de ayer y un 8,80% inferior al de la semana pasada.

Por lo general, adoptamos una visión contraria al sentimiento de la multitud, y el hecho de que los comerciantes estén netos en largo sugiere que los precios de Alemania 40 pueden continuar cayendo.

Los operadores están más largos netos que ayer y la semana pasada, y la combinación del sentimiento actual y los cambios recientes nos da un sesgo de negociación contraria bajista de Alemania 40 más fuerte.

¿Cómo operar en el DAX?

Con los Turbo24 podemos adaptar el apalancamiento de nuestra operativa y estar cubiertos ante huecos de mercado. Además, los Turbo24 no tienen comisiones y se trata de un producto cotizado en un mercado 24 horas, teniendo la ventaja de que, si hay aumentos de volatilidad cuando el mercado está cerrado que activen nuestro knockout, la operación no se cierra. Esto implica que, si al abrir el mercado de contado este lo hace en favor de nuestra dirección seguiremos estando dentro y podríamos seguir obteniendo beneficios. Si, por el contrario, cuando abre el mercado lo hace a un precio igual o superior a nuestro precio de knockout, la pérdida máxima la tenemos garantizada a esa cantidad inicialmente depositada, por lo que estaríamos cubiertos ante huecos de mercado.