Los fondos han vuelto a entrar en Europa por 27 semana consecutiva y han elegido la renta variable, en contra de los bonos. También han optado por Estados Unidos, cuyos índices cerraron el ejercicio en máximos históricos.
Así, tanto Estados Unidos como Europa fueron los mayores destinos para los fondos la semana que terminó el día 1 de enero. En concreto, Norteamérica recibió 2.500 millones de dólares y Europa unos 1.700 millones de dólares.
Los bonos siguieron sin ser activos apetecibles para los inversores. De hecho, hubo salidas netas de renta fija por un importe de 1.700 millones de dólares y entradas netas en acciones por valor de 4.400 millones de dólares. Como viene siendo habitual en las últimas semanas todo gracias a los ETF’s. En concreto a este tipo de vehículos fueron a parar 4.900 millones de dólares.
De hecho, los expertos de Citi afirman que en los vehículos de renta variable que no son ETF’s ha habido salidas netas por un importe de 535 millones de dólares.
En cuanto a zonas geográficas, los países emergentes han sufrido salidas por décima semana consecutiva. La semana que acabó el día 1 de enero se concretó con un flujo 873 millones de euros. Volvió a sufrir también Latinoamérica que por undécima semana asistió a una huída de fondos de algo más de 200 millones de dólares.
En Asia, por el contrario, se produjo una pequeña entrada de dinero de apenas 35 millones de dólares. Se trata de la tercera semana consecutiva y se debe al interés que despiertan tanto los fondos de China como los de Corea.