Viscofan ha logrado un beneficio neto de 31,6 millones de euros durante el primer trimestre del año, lo que representa un aumento del 22,4% en comparación con el mismo período del año anterior. A pesar de esta noticia positiva, la empresa también ha notificado una disminución del 6% en sus ingresos trimestrales, descendiendo a 289,7 millones de euros.

Los ingresos por el negocio tradicional, representando el 83% del total, han caído un 2,5% interanual, situándose en 240,9 millones de euros. Por otra parte, los nuevos ingresos experimentaron una reducción del 12,8%, mientras que los ingresos derivados de la energía disminuyeron hasta un 35% en comparación con el mismo período del año anterior.

En cuanto a las áreas geográficas, Viscofan logró incrementar sus ingresos únicamente en la región de Asia-Pacífico, con un crecimiento del 6% interanual. En contraste, la facturación disminuyó en Europa, Medio Este y África (-6,3%), Norteamérica (-3,8%) y Sudamérica (-18,9%).

El resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 61,6 millones de euros, un 0,2% por debajo del registrado en el comienzo del año anterior. No obstante, el margen Ebitda se incrementó en 1,3 puntos porcentuales, alcanzando el 21,3%. Por otro lado, la deuda neta de la compañía al cierre de marzo ascendió a 176,6 millones de euros, incluyendo una salida de caja de 36,8 millones de euros por la recompra de acciones realizada en el marco de un programa de retribución flexible.

El consejero delegado de Viscofan, José Antonio Canales, ha resaltado que, dentro del proceso de normalización de volúmenes esperado a lo largo del año, el negocio tradicional presenta una evolución acorde a las expectativas, destacando el crecimiento en el mercado asiático y la debilidad continuada en Sudamérica. Asimismo, ha expresado preocupación por la disminución en el precio asociado a la venta de electricidad de cogeneración en España, afectando la evolución de los ingresos.