Durante la reunión en el Congreso con el Grupo Parlamentario Socialista, el líder del PSOE trasladó a los diputados de su partido su impresión de que "todo lo que se hizo" a lo largo de la legislatura anterior y los primeros meses de la actual ha sido "decisivo" para abordar ahora un "cambio de ritmo", al tiempo que se ha evitado la "conflictividad social" como uno de los "efectos destructivos" del aumento del paro.
"La crisis continua, pero eso no significa que nuestros esfuerzos sean inútiles", defendió Zapatero, quien aseguró que los ciudadanos tienen garantizados los "umbrales" de bienestar y derechos sociales, que se seguirán ampliando pese a una situación "grave y severa". Sin embargo, advirtió de que el objetivo de su remozado Ejecutivo no está ya sólo en "parar el golpe y minimizar daños".
"En mi ánimo sigue predominando la esperanza", incidió Zapatero, quien explicó que los cambios en el Gobierno responden a los objetivos de "transitar" de la crisis a la recuperación, de la destrucción de empleo al retorno a la generación de puestos de trabajo y del diálogo social en un "gran acuerdo", que cuente con el "consenso" de las comunidades autónomas. Asimismo, también citó entre sus prioridades el reactivar el crédito para familias y empresas.
APROVECHAR "AL MÁXIMO" EL 'PLAN E'.
Para los próximos meses, las prioridades de Zapatero pasan por diseñar una "estrategia integral para la recuperación de la economía y el empleo, a la que se supeditarán "todas las áreas de Gobierno", aprovechando al "máximo" las medidas de estímulos ya puestas en marcha y que, aseguró, "están empezando a dar sus frutos ahora". Además, aseguró que se adoptarán más medidas "si fuera necesario".
No obstante, el Ejecutivo quiere "acelerar al máximo" su aplicación dentro de lo que permita la ley. Asimismo, señaló que se emprenderán "desde ahora mismo" todas las reformas que permitan afrontar el escenario "posterior a la crisis", que será completamente distinto al actual. AGRADECIMIENTO A LOS AGENTES SOCIALES.
El Gobierno también potenciará la concertación "a todos los niveles", tanto en las relaciones internacionales, como con las comunidades autónomas y ayuntamientos, y con las fuerzas políticas "dispuestas a arrimar el hombro".
En este escenario se incluye a los agentes sociales, ya que Zapatero considera el diálogo social un "eje constitutivo" de su programa político y una "pieza fundamental" para la salida de la crisis, por lo que agradeció a patronal y sindicatos su actitud "extraordinariamente positiva" para garantizar al paz social. EXTRAORDINARIA INFLUENCIA DE ESPAÑA.
Por otro lado, recalcó la importancia del papel "estable" de España dentro en el G-20 y el Consejo de Estabilidad Financiera, así como el cambio en las relaciones con Estados Unidos, ya que los cambios que se vienen produciendo en el orden internacional tienen un efecto "incalculable" para España y su "capacidad de proyección", para lo que citó al propio presidente estadounidense, Barak Obama.
Así, destacó que la presidencia española de la UE durante el primer semestre de 2010 demostrará la "extraordinaria influencia" de España en el mundo, así como de los beneficios de la política económica de los socialistas, que sustentará una "presidencia potente" para Europa. Además, este es el horizonte que se fijó para "evaluar" los resultados de la respuesta "concertada" a nivel internacional para la crisis.
"Nuestro proyecto de visón de las relaciones internacionales para el siglo XXI está dando frutos", celebró el presidente, quien contrastó los resultados de las reuniones del G20 y la OTAN que tuvieron lugar en las últimas semanas con las críticas vertidas por el PP y otros grupos de la oposición por episodios como el anuncio de la retirada de las tropas españolas de Kosovo. "España ocupa ahora el lugar que se merece", zanjó el jefe del Ejecutivo.
El presidente destacó la importancia de la presencia de España en la reunión del G20, porque de la "proyección en el mundo de España depende su fortaleza económica y cómo salga de la crisis". Así, incidió en que el país asume como propios los objetivos para la recuperación trazados por la reunión de Londres, que se convertirán en los ejes de actuación para esta segunda fase de la legislatura.
Por último, Zapatero aseguró que su compromiso para garantizar la protección social en un momento de crisis económica dota de una "enorme coherencia" a su programa político, lo que, advirtió a los parlamentarios del PSOE, les será "extraordinariamente útil" para seguir defendiendo "con todo vigor y coherencia" al "proyecto mayoritario" socialista. "Es lo último de lo que podemos prescindir", remachó.
