Tras reconocer que la "debilidad" del crecimiento económico se está trasladando a los ingresos públicos, Zapatero apuntó que la reducción del superávit "no nos debe llevar al dramatismo", porque es "lógico" que se produzca.No obstante, aseguró que el Ejecutivo seguirá tratando de conseguir superávit en periodos expansivos de la economía, mientras que en momentos como el actual, mantendrá una "actitud general de rigor", con una política fiscal que "contribuya a estabilizar la economía".Por otro lado, apuntó que en el actual contexto de aumento del paro, el Gobierno mantendrá la alta cobertura del subsidio de desempleo y también "consolidará avances" aprobados en la anterior legislatura, como las ayudas por nacimiento o para la vivienda.En su intervención, Zapatero insistió en que el Ejecutivo "no va a incumplir ni dejar en suspenso ninguno de sus compromisos de política social" contraídos.En este sentido, aseguró que el Gobierno cuenta "con margen" para cumplir con sus promesas, "incluso en una hipótesis más pesimista" de la evolución económica, y porque es un "imperativo de equidad social", además de por considerar "inaceptable" que sean los "más vulnerables" quienes tengan que pagar los efectos de la crisis.El jefe del Ejecutivo dijo así que se seguirán mejorando las pensiones más bajas y el salario mínimo hasta alcanzar las cifras prometidas, y anunció que la subida de éste último para 2009 se presentará a los interlocutores sociales.También subrayó que el Gobierno seguirá desarrollando y aplicando la Ley de Dependencia en los términos previstos; cumplirá con el compromiso de mejorar las prestaciones no contributivas; completará la cobertura pública de la educación de cero a tres años, y mejorará el programa de becas.