Además, las nuevas medidas prestarán especial atención al sector del automóvil, uno de los principales damnificados por la crisis.

El pasado sábado, en el Comité General del PSOE, Rodríguez Zapatero, subrayó que las medidas serán "inmediatas, rápidas y muy vinculadas a los entornos locales" con el objetivo de movilizar recursos públicos para estimular el empleo.

Asimismo, consideró que ahora es el momento de adoptar decisiones comprometidas y coordinadas en el ámbito de la Unión Europea (UE) en materia de política fiscal, que han de destinarse a provocar un impacto directo en la actividad económica y en el empleo.

Las últimas medidas, el cuarto bloque para afrontar la crisis económica, fueron aprobadas por el Gobierno el pasado 8 de noviembre, y contenían una serie de iniciativas para ayudar a las familias con dificultades para afrontar sus hipotecas y fomentar el empleo ante las fuertes subidas del paro.

Una de las medidas más relevantes de este último paquete es la posibilidad que tendrán los desempleados y los autónomos con dificultades económicas y cargas familiares de aplazar durante dos años el pago del 50 por ciento de sus cuotas mensuales hipotecarias.

En cuanto a las medidas sobre empleo, el Gobierno aprobó una bonificación de 1.500 euros para las empresas que contraten desempleados con cargas familiares.

Zapatero cuantificó en 170 millones de euros el importe de las medidas de fomento del empleo, y en medio millón el número de beneficiados en dos años.