El mercado de renta variable americano se anima después de que el huracán Irene se haya convertido en tormenta tropical y no haya acarreado tantos daños como se pensaba, la normalidad regresa a EE.UU. De hecho, los operadores de bolsa americana esta mañana confirmaron la apertura ordinaria de la negociación en la NYSE.


A esto se une las esperanzas que el viernes alimentó Bernanke acerca de nuevas medidas de estímulo. Si bien el presidente de la Fed dijo que habría que esperar hasta la próxima reunión del organismo (21 septiembre) para confirmar o no nuevos planes de estímulo, los inversores caminan más seguros. Según
Daniel Pingarrón, analista de IG Markets, "un anuncio de un plan de estímulo sería el catalizador de los mercados para los próximos meses. De hecho, podríamos asistir a un rebote del 10-15% en los próximos meses en este caso". Además, esto ha vuelto a debilitar el dólar para vanagloria de las exportaciones y la divisa americana cae frente al euro marcando un diferencial de 1,45.

Destaca el avance de más del 3% que experimenta Bank of America después de conocerse el viernes que ultima la venta de al menos la mitad de su participación del 10% en el banco China Construction Bank (CCB) por el que espera obtener entre 8.500 y 9.000 millones de dólares.

Sin salir del sector financiero, Wells Fargo y JPMorgan Chase fueron los ganadores de los 9,5 mil millones dólares de préstamos que los EE.UU. dieron al quebrado Bank of Ireland. Wells Fargo sube un 2%, mientras que JPM suma un 1,3%.

En el lado macro, los inversores esperan la publicación de los datos de ingresos mensuales personales y los de consumo, además de las ventas pendientes de casas de julio.

El FMI ha rebajado las previsiones de crecimiento para EEUU y para nuestro país, algo que según señala José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citigroup “no sorprende en absoluto.”