La compañía ha obtenido unos beneficios por debajo de lo pronosticado por los expertos, como consecuencia de que el crecimiento de la producción fue peor de lo que pensaban los analistas y porque los ingresos de refinería fuera de Estados Unidos cayeron.

El beneficio por acción fue de 0,16 dólares por debajo de los 2,34 dólares por acción pronosticados, según una encuesta realizada a 18 analistas por la cadena de finanzas americana Bloomberg.

El beneficio fue de 10.680 millones de dólares o 2,18 dólares por acción, frente a los 7.560 millones del año pasado o 1,60 dólares por acción, según ha informado la compañía en el día de hoy.

Los ingresos procedentes del refinado fuera de los Estados Unidos cayeron un 20% en relación con el mismo periodo de 2010 a cerca de de 622 millones de dólares. La producción de gas natural y petróleo en el trimestre se incrementaron un 10% a cerca de 4,4 millones de barriles al día, menos del 12% de crecimiento esperado por Philipil Weiis, analista de Argus Research en Nueva York.

“La mejora en los ingresos no es tan fuerte como la de algunos de sus compañeros, en relación con el año pasado” ha declarado Brian Youngberg, analista de Edward Jones en St. Louis, que tiene un “mantener” en las acciones de Exxon pero no tiene ninguna. “Parte de esto es atribuible a la compra de XTO, que ha incrementado la dependencia de Exxon a los precios del gas natural de Norteamérica, que siguen siendo débiles en comparación con los del petróleo”.

Las acciones de Exxon pierden un 1,94% y se sitúan en los 81,68 dólares a estas horas.