La compañía de calificación considera que, incluso asumiendo nuevas medidas fiscales, la deuda neta del Gobierno británico podría alcanzar el 100% del PIB del país y mantenerse en este nivel a medio plazo.

El analista de S&P David Beers, la agencia basa su opinión en sus previsiones actualizadas del déficit estatal entre 2009 y 2013.

Estas proyecciones reflejan una visión "más cauta" acerca de la rapidez con la que puede reparase la erosión en los ingresos del Gobierno, el punto hasta el que sus gastos pueden recortarse y, como consecuencia, el ritmo al que puede estrecharse el "históricamente alto" déficit fiscal.

Las previsiones de la agencia de calificación incorporan también estimaciones del potencial coste bruto acumulado de la ayuda estatal al sistema bancario, que actualmente Standard & Poor´s sitúa en un rango de entre 100.000 y 145.000 millones de libras, o entre un 7% y un 10% del PIB británico previsto para 2009.

Todos estos factores conjugados podrían contribuir, según la agencia, a duplicar el endeudamiento del Estado hasta rozar el 100% del PIB en 2013, un nivel que S&P considera incompatible con una calificación de AAA.