Sharp calculó hoy que tendrá una pérdida operativa en el ejercicio fiscal, que concluirá en marzo, de 30.000 millones de yenes (330 millones de dólares) y su pérdida neta será de 100.000 millones de yenes (990 millones de dólares).

Según informó la agencia local Kyodo, serán las primeras pérdidas desde 1953 para Sharp, que en octubre todavía preveía un beneficio neto y operativo de 60.000 millones de yenes (660 millones de dólares) y 130.000 millones de yenes (1.430 millones de dólares), respectivamente.

La empresa nipona dio hoy a conocer sus resultados entre abril y diciembre de 2008, cuando registró números rojos que contrastaron con el beneficio obtenido en el mismo período del año anterior.

En los nueve primeros meses del actual año fiscal Sharp registró un descenso neto de 37.814 millones de yenes (416 millones de dólares) y una pérdida operativa algo menor, de 34.895 millones de yenes (384 millones de dólares).

Ello contrasta con el beneficio neto de 72.906 millones de yenes (802 millones de dólares) y el beneficio por operaciones de 131.047 millones de yenes (1.440 millones de dólares) registrados por Sharp entre abril y diciembre de 2007.

En cuanto a sus ventas, en los primeros nueve meses del año fiscal 2008 supusieron 2,3 billones de yenes (25.277 millones de dólares), una caída del 10,3 por ciento con respecto al mismo período del año anterior.

Sharp pronosticó además que sus ventas en todo el ejercicio anual serán de 2,9 billones de yenes (31.930 millones de dólares), un descenso del 15 por ciento con respecto al año fiscal 2007, debido sobre todo a la apreciación del yen.