A principios de 2007, en estas listas figuraban poco más de dos millones de personas y las empresas "morosas" eran 190.000. Según datos de este registro, los impagos de préstamos hipotecarios se dispararon en 2008, al crecer un 310%, mientras que la morosidad de los créditos personales subió un 91%; la de los préstamos al consumo, un 89; la de los destinados a compra de automóviles, un 85, y los impagos en operaciones hechas con tarjetas de crédito, un 77%.

Fuentes de este registro explicaron a Efe que el incremento del número de morosos relacionados con hipotecas se incrementó "mes a mes" durante 2008 y de manera más pronunciada los últimos meses.

Por su parte, los descubiertos en cuentas corrientes aumentaron un 53 y la morosidad de los pagos de recibos telefónicos, un 57%.

Del volumen de deudas impagadas -26.423 millones de euros-, alrededor de 16.400 millones de euros correspondía a personas -unos 13.000 millones a españoles y otros 3.400 millones a inmigrantes-, y los 10.000 millones restantes a empresas.

En comparación con el cierre de junio de 2008, el saldo moroso declarado de los particulares españoles aumentó un 50,7%, mientras que el de los inmigrantes se incrementó en un 87% y el de las empresas, un 84%.

Según Asnef, el año pasado se cerró con 5,3 millones de operaciones morosas declaradas, un 50,6% más que en 2007.

El registro de Asnef-Equifax se nutre de los datos aportados por 348 entidades, entre las que se encuentran bancos, cajas de ahorro, financieras de crédito, y empresas que gestionan créditos para concesionarios de automóviles o pagos de recibos telefónicos.