Para Annie Lowrey, de slate.com
existen dos factores. En primer lugar, la débil posición de los comercios norteamericanos, que les ha forzado a ofrecer notables descuentos en sus productos para mantener el nivel de compras de sus clientes. (Queda por ver cómo se mantienen esos precios a medida que la economía mejora).


En segundo lugar, los norteamericanos consumen más productos elaborados -como patatas fritas o perritos calientes- cuyos precios son más sensible al marketing o a los envases, que los precios de los alimentos sencillos.

El profesor Mark Perru lo demuestra de forma gráfica: durante los diez últimos años, los precios del crudo han visto subidas y bajadas del 20% cada año, mientras que los productos alimenticios apenas han variado un 5% anual.


Precios Crudo vs. Precios Productos Finales de Consumo
Enero 2001 - Enero 2011