Euro Stoxx 50 es un índice bursátil que representa la evolución de las 50 mayores empresas europeas en términos de capitalización de mercado. En este indicador están presentes, además del Banco Santander, las principales compañías españolas: Inditex, Telefónica, BBVA e Iberdrola. En el sector bancario, las entidades financieras españolas están acompañadas por las francesas BNP Paribas y Société Généralé, la italiana Intesa San Paolo y la holandesa ING.
Pero, ¿qué supone ser el valor más negociado? El volumen de negociación es un elemento muy importante a la hora de valorar si un activo es líquido o no. A mayor volumen, mayor liquidez, es decir, mayor facilidad para vender los títulos en el mercado con menor diferencia entre el precio de compra y el precio de venta -menor spread-. De hecho, es uno de los indicadores que utilizan los analistas técnicos para detectar las señales de cambio de tendencia en la evolución de una acción y expresa el interés de los inversores por un determinado activo. Además, los valores de elevada liquidez suelen ser los más recomendados por los analistas y formar parte de las carteras institucionales nacionales e internacionales.
Banco Santander fue el valor más negociado del EuroStoxx en 2018, donde cuenta con una ponderación del 1,94%. En este periodo cambiaron de manos 19.040 millones de acciones Santander, por un valor efectivo de 95.501 millones de euros, con una ratio de liquidez del 118%. Diariamente se han contratado de media 75 millones de acciones por un importe de 375 millones de euros. La contratación media diaria de BBVA, el segundo mayor banco español por capitalización bursátil, fue de 35,9 millones de acciones, equivalente a 213 millones de euros.
La entidad también ha mantenido el liderazgo por capitalización de los bancos de la zona euro, a pesar de las turbulencias que sufrió el mercado en los últimos meses y que afectaron con especial intensidad a los bancos. El valor en bolsa se situó al cierre de 2018 en 64.508 millones de euros, lo que le convierte en el decimosexto banco del mundo por valor de mercado.
Beneficio por acción y rentabilidad por dividendo
Banco Santander ha cumplido el compromiso marcado en el plan estratégico trianual 2015-2018 de crecer a doble dígito en beneficio por acción. De esta forma, el BPA creció en tasa interanual al 11,2%. En cuanto a la rentabilidad por dividendo, la entidad ha ofrecido un 4,65% si se tienen en cuenta el dividendo total previsto con cargo al pasado ejercicio y el precio medio de la cotización.
El banco tiene ya ha repartido tres dividendos, de 6,5; 3,5 y 6,5 céntimos por acción, respectivamente. Queda pendiente un último dividendo, en el mes de mayo, que se abonará en efectivo por un importe de otros 65 céntimos. En total, la retribución a los accionistas con cargo a los resultados del ejercicio 2018 será de 23 céntimos de euro por acción, lo que supone un incremento del 4,5% respecto del abonado sobre 2017. Para este año, la política de dividendos ofrecerá algunos cambios. Según anunció Ana Botín, presidenta de Banco Santander, en la última junta de accionistas, el consejo del banco propondrá que el dividendo de 2019 se abone íntegramente en efectivo y que se fraccione de forma semestral (hasta ahora se hacía en cuatro tramos), uno a cuenta en el mes de noviembre y otro complementario en mayo.
Los accionistas del Santander continúan confiando en la acción. Al cierre del pasado diciembre, el banco contaba con 4,13 millones de accionistas, lo que supone un aumento de 101.859 inversores en al año.
De esta cifra, los accionistas minoritarios poseen el 39,76% del capital, mientras que los institucionales cuentan con un 59,11%. El resto, un 1,13% está en manos del consejo de administración del banco. Respecto a la distribución geográfica, el 77,29 % de los titulares de acciones Santander son europeos frente al 21,63% de inversores americanos.