Sin embargo, las alzas fueron frenadas por la preocupación entre los inversionistas frente a las ventas minoristas de fin de año. El mercado mostró cierta decepción ante los resultados de las ventas minoristas durante el llamado Viernes Negro, que marca el inicio de la temporada de ventas de fin de año. A esto se sumaron las afirmación de un funcionario del Gobierno de Dubai, quien dijo que la deuda de Dubai World no está garantizada por el Gobierno.


Tras una sesión con altibajos, el Promedio Industrial Dow Jones subió 35 puntos, o el 0,3%, para cerrar en 10345. Dentro del índice, Bank of America subió el 2,5% a 15,85 dólares y J.P. Morgan Chase el 2,8% a  42,49 dólares.


Bank of America y J.P. Morgan Chase se recuperaron de sus caídas del viernes, después que el funcionario de Dubai también indicara que los mercados no deberían preocuparse por los bancos.

El Índice Compuesto Nasdaq ascendió 6 puntos, o el 0,3, a 2144 y el Standard & Poor's 500 trepó 4, o el 0,4%, a 1095.

Las acciones de American International Group Inc. caer un 14,7% a 28,40 dólares luego que un analista rebajara su precio indicativo un 40% debido a los temores sobre reservas por pérdidas de la aseguradora que podrían tener "importantes ramificaciones" a futuro.

Abdulrahman Al Saleh, director general del Departamento de Finanzas de Dubai, dijo el lunes en la emisora estatal Dubai TV que la deuda de Dubai World no está garantizada por el Gobierno de Dubai y que los mercados necesitan diferenciar entre la compañía holding y el Estado.

Los problemas crediticios de Dubai World fueron divulgados el miércoles pasado, luego que la mayor entidad corporativa de la ciudad estado solicitara a los acreedores una extensión de seis meses para el pago de los intereses de su deuda. Las acciones cayeron el viernes en reacción a la noticia.

Sin embargo, la percepción en el mercado mejoró ligeramente luego que Dubai World señalara cerca del cierre que mantiene conversaciones constructivas con los bancos para reestructurar cerca de 26.000 millones de dólares en deuda, de los cuales alrededor de 6.000 millones de dólares está vinculados a los certificados financieros árabes conocidos como sukuk emitidos por su filial Nakheel.

El estratega Steve Charest de Divine Capital Markets dijo que la crisis se presentó en momentos en que los inversionistas en acciones estadounidenses se habían vuelto algo complacientes sobre lo riesgos de que se produzca un nuevo golpe al sistema financiero mundial, mientras el índice de volatilidad de la Chicago Board Options Exchange se ubicaba cerca de su nivel más bajo desde los mínimos del mercado bajista registrados en marzo.

"Tanto como cualquier otra cosa, creo que la situación de Dubai ha sido un catalizador para eliminar parte de esa complacencia", dijo Charest. "La percepción debía moverse en la otra dirección en algún punto, y este fue un detonador tan bueno como cualquier otro".

Las acciones en Estados Unidos fueron también presionadas por los informes divergentes de ventas minoristas divulgados durante el fin de semana.

Cerca de 195 millones de consumidores realizaron compras en tiendas y en línea durante el fin de semana del Viernes Negro, un aumento frente a los 172 millones de hace un año, según la National Retail Federation.

Sin embargo, el gasto promedio descendió a 343,31 dólares por persona frente a los 372,57 dólares de hace un año. Las ventas totales en el fin de semana de cuatro días sumaron 41.200 millones de dólares, un ligero aumento frente a los 41.000 millones de dólares del año pasado, estimó la NRF.

En tanto, el Instituto de Gestión de Suministros de Chicago informó que su Barómetro Empresarial -conocido previamente como Índice de Gerentes de Compra- se ubicó en noviembre en 56,1 tras situarse en 54,2 en octubre. Una lectura superior a 50 sugiere una expansión económica, mientras que si es inferior a 50 indica una contracción.

La lectura de noviembre fue superior a la anticipada por los economistas encuestados por Dow Jones Newswires, quienes esperaban, en promedio, que el barómetro se ubicara en 53,5.