El dato de destrucción de empleo ha mejorado las expectativas del mercado, que anticipaba una cifra en el entorno de los 100.000 despidos, puesto que la media de los tres meses anteriores ascendía a 135.000 despidos mensuales.

De este modo, la economía estadounidense ha registrado un aumento de 7,9 millones de desempleados
desde que la recesión comenzara en diciembre de 2007, hasta un total de 15,4 millones de parados, mientras que la tasa de paro ha crecido 5,1 puntos porcentuales.