La Reserva Federal dio ayer su informe mensual sobre el estado de las finanzas. El dato más destacado fue la caída en la deuda de las tarjetas de crédito hasta niveles de hace siete años. En general, la mayoría de consumidores no están pagando los saldos de sus tarjetas de crédito. En cambio, los bancos están cancelando deudas incobrables antes de que los consumidores puedan acumular nuevas deudas.

Según un analista de fool.com: “la deuda de las tarjetas de crédito en EEUU se redujo en 34 billones durante los dos primeros trimestres de 2010; sin embargo, los bancos cancelaron 42,5 billones de dólares en deudas incobrables de tarjetas de crédito durante el mismo período”.

La mayoría de los bancos han detenido el flujo de su hemorragia en sus divisiones de crédito. El año pasado la mayoría de los emisores de tarjetas de crédito obtuvieron beneficios, a excepción de Bank of America.

El mundo de las tarjetas de crédito es un mundo raro: los consumidores se están librando de las deudas de las tarjetas de crédito pero no porque no paguen, sino porque los bancos están sacrificándose por ellos. A pesar de todo, a los bancos les sigue siendo rentable. Al fin y al cabo, este es un negocio en el que se presta dinero a un interés de un 30%.

Esta es la cotización de los principales bancos americanos a las 19:52: Bank of America suben un 0,16% y Citigroup un 0,11%, mientras que American Express y JP Morgan Chase bajan un 0,45% y un 0,69%, respectivamente.