Iberdrola respira un poco más tranquila al saber que la factura impositiva se muestra claramente a la baja al dejar fuera de juego los ingresos de los negocios regulados y los beneficios que se obtienen en el extranjero, con lo que el montante a pagar podría oscilar entre los 200 y 300 millones de euros anuales, en principio para los dos próximos ejercicios.
Mientras, se mantiene a la búsqueda de socio mientras el fondo soberano de Noruega, el Norges Bank parece estar entre los tres principales para optar a esa cartera del 49% de renovables en España, y que alcanza los 1,2 gigavatios. Activos que estarían valorados en unos 1.200 millones de euros y que supondrán un monto cercano a los 600 millones para la compañía. También, según su plan estratégico, esta operación, que se cerraría con el elegido por la compañía a principios del próximo ejercicio, se enmarcaría en su plan de rotación de activos con los que espera captar 1.700 millones de euros anuales hasta 2025.
Si miramos a lo que opinan los analistas sobre el valor nos encontramos con que, uno de los que peor opinan es RBC que deja su precio objetivo en 11,80 euros por acción , mientras se recomienda mantener el valor en cartera. Todo lo contrario que Barclays que ofrece uno de los mejores PO sobre la compañía energética con la idea de sobreponderar el valor y 14,10 euros por acción en margen de mejora, lo que supone un potencial para las acciones de Iberdrola del 31% sobre su precio actual.
Además, la más reciente procede de Goldman Sachs que recomienda comprar sus acciones en el mercado con un precio objetivo de 12,50 euros por acción para los títulos de la energética que preside Ignacio Sánchez Galán.
En su gráfica de cotización vemos que la progresión de Iberdrola en la bolsa española le lleva a recuperar en el año un 7,3% y más de un 4% en las últimas 20 sesiones bursátiles.
Desde el punto de vista fundamental, la analista María Mira destaca que Iberdrola “en base a una valoración por ratios y con un BPA estimado para el cierre de 2022 ahora de 0,66€/acción, el valor cotiza con un PER de 15, 4v 2022e, con ligero descuento frente al ratio histórico en torno a las 18v en los tres últimos ejercicios, y margen también de mejora frente al PER medio para las compañías del selectivo Ibex 35”.
Además, señala la experta fundamental de Ei que “por Valor contable el mercado descuenta 1.4v para Iberdrola, inferior al de sus principales competidores y 2v para las compañías que componen el selectivo español. La rentabilidad sobre dividendo-Yield de Iberdrola (4,4% a precios actuales) se antoja muy interesante. En base a nuestra valoración fundamental mantenemos recomendación positiva a largo plazo para una compañía con calidad fundamental y buenas perspectivas de crecimiento”.
Iberdrola “se mantiene sin grandes cambios situándose bajo el área de resistencia de los 11.589 / 1,18€ por acción y por encima del área de soporte de los 8,54 / 8,22€ por acción. Al corto plazo, se activa una figura de acumulación en forma de Hombro-Cabeza-Hombro invertido (HCHi) que podría provocar rotaciones alcistas, figura que no se vería anulada mientras no perfore el mínimo del segundo hombro proyectado a partir de los 9,384€ por acción”.
Iberdrola en gráfico semanal (Izq.) y diario (Dcha.) con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Mientras comprobamos cómo los indicadores técnicos que elaboran Estrategias de Inversión colocan a Iberdrola, en modo consolidación, con una tendencia alcista mixta, que es bajista a largo plazo, pero alcista a medio. Momento total lento positivo y rápido negativo para sus acciones. Con volumen de negocio, también mixto , ya que se muestra decreciente a medio plazo y creciente a largo para el valor. En el caso de la volatilidad o rango de amplitud, se muestra creciente en ambas vertientes, tanto a medio como a largo plazo en el caso de los títulos de Iberdrola.
