Tras haber subido con fuerza en las últimas semanas, el “alto en el camino” que hizo ayer el precio del crudo fue muy bien recibido por los mercados de bonos, lo que propició a su vez el descenso de sus rentabilidades y el rebote en las bolsas de los valores más sensibles al aumento de los tipos de interés. Todo ello permitió a la mayoría los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses cerrar la jornada con sensibles alzas.

Este jueves, y pesar de que en estos momentos el precio del crudo vuelve a subir, el DAX alemán repunta un 0,67% hasta situarse en los 15.350,85 puntos, el CAC 40 un 0,82% en los 6.651,18, el FTSE 100 de Londres un 0,68% y llega  a los 7.190,40, y el Ibex 35 avanza un 0,76% y supera los 8.900. En el caso de la bolsa italiana, el repunte es del 0,64% en los 26.126,00, mientras que el EuroStoxx 50 avanza un 0,87% y marca 4.118,95. 

La “crisis energética” que afecta sobre todo a Asia y Europa, sigue pesando en los inversores, que no creen que vaya a ir a ninguna parte en el corto plazo, crisis provocada por los elevados precios del gas natural, algo que está llevando a sustituir este combustible por el crudo para generar energía en ambos continentes. 

Además, las noticias que se dieron a conocer ayer con relación a la inflación no fueron nada positivas. Así, en Alemania se confirmó que esta variable alcanzó en septiembre su nivel más elevado desde 1993, mientras que en EEUU la inflación del mes de septiembre superó ligeramente lo esperado por los analistas al situarse en el 5,4%, su nivel más alto desde 1991. Además, esta madrugada el índice de precios de la producción (IPP) de China se ha situado a un nivel récord. Todo parece indicar que factores como los cuellos de botella en las cadenas de suministros, las dificultades de muchas empresas para encontrar personal cualificado y los elevados precios de las materias primas y de los combustibles fósiles van a hacer que la alta inflación sea “menos transitoria” de lo que vienen defendiendo hasta ahora los bancos centrales.

Los dirigentes de la Fed señalaron que podrían empezar a reducir a mediados de noviembre el apoyo que dieron a la economía durante la crisis, pero siguen divididos sobre la amenaza de la inflación y la rapidez con la que podrían tener que subir las tasas de interés, según las actas del 21 y 22 de septiembre.

De momento, y en línea con lo que se esperaba, ayer en las actas del FOMC se confirmó que la Fed va a empezar a reducir sus compras mensuales de bonos antes de finales de año, aproximadamente en $ 15.000 millones al mes -actualmente está comprando mensualmente $ 80.000 millones en bonos del Tesoro y $ 40.000 millones en bonos garantizados por hipotecas-, para finalizar el proceso a mediados de 2022. Además, no parece que tenga la intención de comenzar a subir sus tasas de interés oficiales, al menos hasta 2023. No obstante, esta decisión sí puede verse condicionada por una alta inflación más persistente, algo que no creemos que esté descontado por los mercados financieros occidentales. 

En el mismo asunto, la temida inflación, los ministros de Finanzas del G20 respaldan el acuerdo fiscal y se comprometen a vigilar la inflación.

En el frente inflacionista, los mercados han respirado con alivio después de que China se desmarcara de la tendencia y publicara hoy unos datos de inflación ligeramente inferiores. La inflación intermensual de septiembre cayó al 0,0%, por debajo de la previsión del 0,30%, mientras que la interanual cayó al 0,70% desde el 0,80%. Sin embargo, hay una pizca de sorpresa, ya que el IPP interanual de septiembre subió al 10,70%, el más alto desde que se iniciaron los registros. Esto sugiere que las presiones inflacionistas persistirán en la cadena de valor de China.

Los precios anuales de las fábricas chinas crecieron en septiembre a su ritmo más rápido jamás registrado, impulsados por las restricciones energéticas y la subida de los precios de las materias primas, lo que aumenta la presión sobre las empresas, que ya se enfrentan a cuellos de botella en el suministro.

Otras bolsas

Los mercados bursátiles asiáticos suben, el dólar cede terreno y los bonos a más largo plazo se recuperaban, mientras los inversores prevén que la inflación adelante las subidas de tipos de interés en todo el mundo.

En EEUU, Wall Street cerró ayer en terreno mixto, con un retroceso mínimo en el Dow Jones, tras una jornada marcada por los datos de inflación y las actas de la última reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed); por su parte, el selectivo S&P 500 ascendió un 0,30 y el Nasdaq ganó un 0,73%. Este jueves, los futuros de los índices americanos cotizan todos en verde: subidas del 0,59% para el Dow Jones, del 0,61% para el S&P 500 y del 0,69% para el Nasdaq.

Los precios del petróleo ganan terreno, revirtiendo las pérdidas anteriores, ya que una reducción mayor de la esperada en las existencias de gasolina y destilados de Estados Unidos impulsaba las compras. Ahora mismo, los futuros del petróleo Brentrepuntan un 0,82% hasta los 83,86 dólares por barril, mientras que los del West Texas suben un 0,77% hasta los 81,06 dólares.

En el tema del petróleo, los datos del instituto API muestran un alza de inventarios de crudo en EEUU y una caída en los de combustibles, según Reuters.

En el mercado de las criptomonedas, el bitcoin sube un 4,41% hasta situarse en los 57.811,3 dólares.

En el par EUR/USD el euro cotiza en 1,1597 billetes verdes, con ligeras subidas del 0,05%.

Agenda del día

Este jueves se va a publicar la producción industrial de Japón (sube al 3,6%, desde el 3,2% anterior).

En España, el dato a seguir también será el IPC del mes de septiembre. En Reino Unido, el Banco de Inglaterra dará a conocer el informe sobre condiciones de crédito.

Y en Estados Unidos se publicará el dato semanal de peticiones de subsidio por desempleo, el IPP de septiembre y los inventarios de petróleo de la AIE.