Bolsa

El IBEX 35 termina la sesión con alzas del 1,81% en los 7.945 puntos. Lo mejor es para Ferrovial, que sube un 3,73% en los 25,60 euros, Acciona Energía suma un 3,57% en 38,84 euros e Inditex repunta un 3,50% hasta los 24,23 euros. En negativo, solo cuatro valores: Telefónica cede un 1,50% en los 4,6590 euros, Siemens Gamesa se deja un 0,53% hasta los 17,865 euros, Aena cede un 0,24% y Red Eléctrica de deja un 0,06%. 

En el resto de Europa, el DAX sube casi un 3%, el CAC 40 repunta un 2%, el FTSE MIB avanza un 1,85%, el FTSE 100 un 1,77% y la media europea, el EURO STOXX 50 suma un 2,40%. 

Las buenas cifras de ventas minoristas en EEUU impulsan a los índices en Wall Street: el Dow Jones sube más de un 2%, el S&P 500 un 1,75% y el Nasdaq 100 un 1,63% a esta hora. Sirven también de catalizador las palabras de la presidenta del Banco de la Reserva Federal de San Francisco, Mary Daly, que dijo el viernes que no le preocupa que el banco central de Estados Unidos esté subiendo demasiado las tasas, en un momento en que está reduciendo el respaldo a una economía que sigue siendo fuerte.

"No me preocupa que las cosas se sobrecocinen", dijo Daly al programa Morning Rush de Newsy, señalando que la Fed había estado ofreciendo un respaldo extraordinario a la economía golpeada por la pandemia y que ahora lo está reduciendo para tratar de bajar la tasa de inflación, demasiado alta.

Hacerlo ayudará a los estadounidenses que actualmente tienen dificultades para pagar la gasolina y los alimentos, y aunque el aumento de los costos de los préstamos lo hace "un poco doloroso" ahora, la inflación debería ser menos dolorosa a finales de año, señaló.

Sesión marcada también por la publicación de nuevos resultados empresariales en Estados Unidos, como los de Citigroup, Wells Fargo y BlackRock, y por otros datos macro de interés para los inversores, como el PIB de China.

El producto interior bruto (PIB) de China registró una contracción del 2,6% en el segundo trimestre del año respecto de los tres meses anteriores, cuando había crecido un 1,4%, como consecuencia del impacto de las restricciones para contener la propagación de la Covid-19 y de la crisis del sector inmobiliario, además de los problemas de la economía internacional, según los datos de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).

Wells Fargo ha presentado una caída del 48% en sus utilidades trimestrales, ya que el banco reservó más fondos para cubrir posibles pérdidas de préstamos, mientras que su negocio de créditos hipotecarios se vio presionado por la subida de las tasas de interés.

Blackrock informó el viernes de una caída mayor de lo esperado en las ganancias trimestrales, ya que la agitación en los mercados globales redujo los ingresos por comisiones del administrador de activos más grande del mundo y los inversores minoristas rescataron sus ahorros.

Cuentas también de Citigroup, que ha presentado este viernes un descenso del 27% de las ganancias del segundo trimestre porque provisionó dinero para préstamos posiblemente peligrosos y su negocio de banca de inversión se vio afectado por la desaceleración de las operaciones corporativas.

El inicio de la temporada de resultados trimestrales no comenzó con buen pie, ya que los dos grandes bancos que dieron a conocer ayer sus cifras, JP Morgan y Morgan Stanley, se quedaron lejos de lo esperado por los analistas y, además, se mostraron pesimistas con relación al devenir de la economía estadounidense en los próximos meses. "En este sentido, señalar que uno de los factores que más lastró las cuentas de JP Morgan en el trimestre fueron las provisiones que dotó para contrarrestar un potencial repunte de la morosidad de sus clientes", apunta los analistas de Link Securities.

“No tengo mucho optimismo sobre nuestra capacidad de aumentar las ganancias en este entorno”, dijo el jueves la CIO de G Squared Private Wealth, Victoria Greene, en “ Closing Bell: Overtime ” de CNBC. “No creo que haya sido malo o trágico, pero creo que, desafortunadamente, en esta temporada de ganancias, cualquier error en las ganancias o los márgenes será castigado y cualquier golpe real puede ser destrozado”.

El nuevo máximo en el IPC estadounidense, el 9,1% conocido el pasado miércoles, en máximos de 1981, disparó las especulaciones sobre la posibilidad de que la Reserva Federal respondiera el 27 de julio con una subida de tipos del1%, el cuádruple de lo habitual que es un 0,25%. Desde la organismo monetario, uno de sus 'halcones', el presidente de la Reserva Federal de San Luis James Bullard, enfrió ayer esa posibilidad. La opción de un aumento de 75 puntos básicos vuelve a ser la dominante.

IPC EEUU

En Europa, las turbulencias vienen en la recta final de la semana desde Italia, donde el primer ministro, Mario Draghi, llegó a presentar su dimisión ante la falta de apoyos. Una salida que el presidente de la República, Sergio Mattarella rechazó, para evitar un nuevo caos político. Una incertidumbre que está afectando las primas de riesgo periféricas, con la española en torno a los 115 puntos y el interés del bono a 10 años en el 2,27%.

Esto se suma a los temores a los cortes de gas de cara al invierno, que obligarían a países como Italia y Alemania a tener que racionar la energía y para lo que España ya estaría preparando un plan de contingencia, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Los precios del petróleo vuelven a subir después de haber caído alrededor de un 20% en el último mes, en respuesta a los crecientes temores de recesión. Los datos de la inflación del miércoles no ayudaron a la situación, ya que el mercado valoró la posibilidad de que la Reserva Federal subiera un 1% este mes. Esto hizo que los precios del crudo bajaran aún más, pero las palabras tranquilizadoras de Bullard y Waller (de la Fed) aseguraron a todos que los 75 puntos básicos siguen siendo el caso base. El Brent ha vuelto a superar los 100 dólares por barril gracias a esas palabras, pero promete seguir siendo inestable en medio de un mercado ajustado y de las continuas preocupaciones por la recesión, apuntan los analistas de OANDA. Los futuros suben a esta hora en torno a un 2,5%.

El presidente Joe Biden discute este viernes en Arabia Saudita sobre el suministro de energía, los derechos humanos y la cooperación en materia de seguridad, en un viaje diseñado para restablecer la relación de Estados Unidos con un país al que una vez prometió convertir en un "paria" en el escenario mundial.

En el mercado de divisas, el dólar se consolidaba el viernes cerca de sus máximos de dos décadas porque los operadores coqueteaban con la perspectiva de una subida de tasas de 100 puntos básicos de la Reserva Federal a finales de este mes, mientras el euro se mantenía cerca de la paridad. "Con la posibilidad de que se aceleren las subidas de tasa en Estados Unidos y el BCE estancado en la neutralidad frente a una fuerte desaceleración económica europea, el mercado aún no ha renunciado a la idea de una ruptura a la baja (del euro) hacia el siguiente soporte clave en torno a 0,96", dijo John Hardy, jefe de estrategia de divisas de Saxo Bank.

El euro sube a esta hora un 0,75% en los 1,0091 'billetes verdes'. En lo que va de año, la moneda única acumula una depreciación próxima al 12% respecto del dólar como consecuencia del mayor temor a que la eurozona acabe entrando en recesión.

Por el lado macro, las ventas minoristas, que aumentaron más de lo previsto en junio, ya que los consumidores compraron vehículos de motor y otros bienes, pese a que tuvieron que pagar más por la gasolina. Las ventas minoristas aumentaron un 1,0% el mes pasado, informó el viernes el Departamento de Comercio. Los datos de mayo fueron revisados al alza para mostrar que las ventas cayeron un 0,1% en lugar del 0,3% que se había informado antes. Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que las ventas minoristas aumentarían un 0,8%, con estimaciones que oscilaban entre una caída del 0,2% y un aumento del 2,2%. Las ventas al por menor se componen principalmente de bienes y no se ajustan a la inflación.

También se ha publicado la producción industrial de junio, que en este caso ha quedado por debajo de lo esperado, al caer un 0,2% frente a la subida del 0,1% prevista.