El máximo dirigente de la institución internacional señaló en rueda de prensa que en el conjunto de la zona euro el riesgo país no suponía ninguna amenaza e incluso se mantenía en niveles relativamente bajos, mientras que subrayó que en algunos casos de países aislados el FMI no considera necesario "fijar su atención en otros países aparte de Grecia".

Asimismo, Strauss-Kahn descartó la posibilidad de que Grecia se viera forzada a reestructurar su deuda, lo que implicaría que los acreedores del país heleno asumieran pérdidas, incluso después de conocer la actualización del déficit griego anunciada por Eurostat, que coloca a las finanzas públicas helenas en una situación "un poco peor".