"En este momento es muy difícil hacer previsiones, pero las condiciones objetivas hacen temer lo peor", fueron las palabras del ministro de Trabajo, Maurizio Sacconi, que utilizó un tono muy distinto al optimismo con que había afrontado la cuestión hasta ahora.La férrea oposición de los sindicatos a las condiciones laborales previstas en el nuevo contrato y, sobre todo, los numerosos despidos que implica el plan estarían a punto de hundir el proyecto de salvamento ideado por el Gobierno de Silvio Berlusconi, bajo los consejos de Intesa SanPaolo.MÁS DE 6.000 DESPIDOSSegún los cálculos ofrecidos por los sindicatos, en realidad, los despidos ascenderían a más de 6.000 y de ellos, unos 1.000 serían de pilotos, cuyos sindicatos son los que se mostraron más herméticos desde el inicio de las negociaciones.Por esta razón, los sindicatos habrían iniciado conversaciones con otras entidades financieras italianas para sacar adelante un plan alternativo al del Gobierno. Según informaron los medios italianos, una de ellas podría ser Unicredit, que precisamente es uno de los principales competidores de Intesa SanPaolo. No obstante, tanto Unicredit como algunos sindicatos desmintieron poco después esta información.Por su parte, el consejero delegado de Intesa SanPaolo, Corrado Passera, acusó a los sindicatos de "no darse cuenta de la situación" que atraviesa la compañía, "especialmente, los pilotos", concretó.Passera acudió junto al comisario extraordinario de Alitalia, Augusto Fantozzi, y el presidente de la Cai, Roberto Colannino a la sede del Gobierno italiano, donde mantuvieron una reunión con el subsecretario del Consejo de Ministros, Gianni Letta, para analizar la situación.Por su parte, el secretario de Unión de Pilotos, Roberto Spinazzola, acusó a los negociadores de la Cai de no haber dejado "ningún margen de apertura" a las propuestas y sugerencias de los trabajadores. Por esta razón, ahora, la nueva Alitalia "está colgando de un hilo y va hacia la quiebra".Spinazzola rechazó que "sean caprichosos, inconscientes y no entiendan la gravedad de la situación" sino que "lo que se ha presentado a los sindicatos no es lo que había dicho Berlusconi, es decir, que los despidos habrían sido menos que los que preveía Air France", concluyó.