Según los expertos en mercados emergentes consultados por CNBC, no es muy buena idea invertir en Brasil a pesar del empujón financiero que supone el Mundial. Sin embargo, las reformas fiscales de la nueva administración podrían tener un gran efecto.

Para el experto en investigación de mercados Drausio Giacomelli,“no hay ninguna ventaja para este gobierno, incluso si todo va bien. No se trata de si Brasil gana el Munidal, se trata de a lo que se expone: un ejecutivo que es incapaz de cubrir las necesidades de educación, transporte o infraestructura en general, puede construir estadios, pero eso no es lo que importa”.

Giacomelli también critica la política monetaria de Brasil durante el gobierno de Dilma Rousseff. “Brasil va mal desde el comienzo del ciclo de Dilma. Se ponen en una situación que es el peor de los casos para los mercados emergentes: bajo crecimiento y alta inflación”, comenta.

El jefe global en investigación de mercados emergentes, Luis Oganes, también analiza la situación política antes de las elecciones presidenciales de octubre. “La inflación sigue siendo un problema y que Brasil recorte los tipos de interés no va a ayudar el crecimiento. Necesita reformas y antes de las elecciones nadie va a invertir más en Brasil si recortan los tipos”, indica.

EL CAMBIO ES POSIBLE

Por su parte Gaite Ali, gerente de cartera de renta variable en mercados emergentes de Morgan Stanley Investment Management, destaca el potencial de crecimiento de una nueva administración. “La confianza empresarial es muy, muy baja en Brasil. Las compañías son muy pesimistas sobre las perspectivas políticas”, apunta.

Ali recomienda varias áreas para la inversión selectiva a pesar de los grandes desafíos de Brasil, como las empresas industriales para mejorar el crecimiento de la infraestructura, finanzas y consumo. “Lo que pasa con Brasil es que tiene que cambiar mucho para que el mercado empiece a moverse. Aun así, yo sería bastante optimista”, concluye.

JA.M.