A pesar del aumento de las hostilidades en las negociaciones comerciales entre China y EEUU,  los bonos estadounidenses  experimentaron ayer un pánico comprador que provocó un fuerte aumento de su cotización.

A pesar de las disputas comerciales, los bonos estadounidenses continuan actuando como un refugio seguro, tanto en lo que hace referencia a la rentabilidad como a la solvencia.

Llama la atención que a los participantes en el mercado no les preocupe la posiblidad de que China adopte una posición más dura en las negociaciones amezando con vender deuda pública estadounidense.

El volumen de las importaciones procedentes de China que llegan a EEUU es mucho mayor que las importaciones que China realiza de los EEUU. Por ese motivo, China necesitará más potencia de fuego si quiere presionar a los EEUU. Su verdadera arma es amenazar con la venta de deuda pública norteramericana, pues EEUU tiene una posición dominante en las negociaciones.

Las dudas sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo comercial entre ambos países podría frenar el crecimiento económico global y, por lo tanto, podría provocar una descaceleración económica en los EEUU. Y finalmente un descenso mayor de las bolsas, vía una menor tasa de crecimiento de los beneficios empresariales.

Los dos países tienen mucho que perder, lo que me hace pensar que lo más probable es que traten de alcanzar un acuerdo o que prolonguen las negociaciones.

Si nos fijamos en el gráfico del S&P 500, podemos observar que no fue capaz de superar la resistencia del 2.900 y se ha girado bruscamente a la baja hacia la zona de soporte de los 2.800.

En el gráfico también observamos que el tramo desplegado a la baja desde los máximos del pasado 1 de mayo presenta una estructura correctiva. Este hecho aumenta la probabilidad de que esté desplegando una onda A de una fase correctiva.

El VIX volvió a situarse por encima de 18 y la estructura de los futuros sobre el VIX adopto de nuevo pendiente negativa.

La economía china se ha estabilizado y  el S&P 500 está cerca de niveles máximos a pesar de las caídas de estas dos semanas, por lo que ninguna de las partes tienen la necesidad inmediata de dar marcha atrás. Por lo tanto, lo más probable es que a corto plazo no surjan buenas noticias sobre el acuerdo comercial.

Si EEUU y China no van a alcanzar un acuerdo a corto plazo pero siguieran prolongando las negociaciones sin descartar un posible acuerdo,como parece más probable, deberíamos considerar que el S&P 500 podría seguir deslizándose a la baja a la zona de los 2.775.

El NASDAQ 100, ante la debilidad de los FAANG y de Apple, fue incapaz de superar la primera zona de resistencia y ahora podría retrroceder a la zona de los 7.200.

Trump está estudiando la posibilidad de extender el conflcto comerical a más países, como la Unión Europea, México y Canada, de cara a las elecciones de 2020.

En Europa, nos hemos encontrado con que el sector de fabricantes de automóviles y el de recursos básicos han sido los más prejudicados.

Y los índices tampoco consiguieron superar las zonas de resistecia significativas, por lo que que es probable que el DAX se aproxime a la zona de soportete de los 11.800 y el IBEX, a la zona de los 8.900.