- Acaban de lanzar un nuevo fondo en conjunto con Trea Asset Management, el Trea Healthcare Ventures, ¿qué supone esta asociación? 

Trea Asset Management es una de las gestoras independientes mas reconocidas del país, tiene una dilatada experiencia en la gestión de activos y ha tenido mucho éxito a lo largo de las últimas dos décadas. 

El equipo de Discovery Ventures tiene una trayectoria importante en el ámbito de la inversión en tecnologías biomédicas. Tenemos entre nosotros no solo gestores, expertos en la gestión de activos de venture capital o de fondos, si no que además contamos con algunos de los emprendedores en serie dentro de nuestro equipo más potentes del sector de las tecnologías biomédicas de próxima generación, como son la terapia génica, la nanobiotecnología, la biónica y la terapia celular avanzada...

Algunos pioneros en este campo han conseguido en Estados Unidos, Francia y Reino Unido, la primera terapia génica aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de EEUU, la segunda terapia génica aprobada por la FDA y la primera terapia celular avanzada aprobada por la Agencia Europea del Medicamento. A través de esto la asociación nos permite dar la oportunidad de acceder al inversor español a través de un vehículo de capital riesgo, domiciliado en España que tiene unas importantes ventajas fiscales, a tener una exposición a este tipo de empresas.

- ¿Por qué es una buena oportunidad invertir en empresas del cuidado de la salud en estos momentos?

En estos momentos hay que entender que nos encontramos ante el mayor cambio de paradigma en el ámbito de las ciencias de la vida de los últimos siglos. Hay que entender que hace solo cinco años se obtuvo la primera aprobación por la FDA de Estados Unidos de una terapia génica y esto es uno de los grandes pilares de esta transformación. La utilización de la terapia génica permite la curación de enfermedades, que hasta hace poco eran impensables que pudieran curarse en combinación con otros tipos de tecnologías como la terapia celular, la nanobiotecnología, la biónica, la inteligencia artificial o la ingeniería de tejidos. Estas tecnologías están dando lugar a esta transformación. Desde mi punto de vista tenemos que entender que la utilización de estas tecnologías va a formar parte de nuestra vida, de la misma manera que los semiconductores, las vacunas, los computadores, internet o los teléfonos móviles. Esta perspectiva da paso a saber que es un momento también muy interesante para invertir en este sector. Históricamente a lo largo de los últimos 15 años, en este sector de la inversión de mercado de capitales privados, de venture capital y de empresas de biotecnología, el retorno anualizado ha sido de un 30%. Además, es un sector muy defensivo desde el punto de vista que protege de un modo intrínseco contra la inflación, algo que es particularmente importante en el momento actual.  

- ¿Cuál es la filosofía de inversión del fondo y qué criterios utilizan a la hora de seleccionar las compañías para la cartera? ¿Hay algún sesgo de países?

Desde un punto de vista geográfico, nosotros invertimos principalmente en empresas que están radicadas en Estados Unidos y en Europa. El equipo de inversión tiene oficinas en Nueva York, en Londres y en París. En cuanto a la filosofía de inversión del fondo, invertimos en etapas tempranas, en las series A plus, en adelante. Y básicamente invertimos en estas empresas que buscan obtener la cura a enfermedades que son graves,  que son altamente debilitantes, utilizando las tecnologías de próxima generación, como la terapia génica, la terapia cerebral avanzada, la nanotecnología, la biónica o la inteligencia artificial, y enfermedades que afectan a un gran número de pacientes que a día de hoy no tienen cura. Esencialmente, una de las características principales de nuestro equipo es que, dado nuestra reserva de las capacidades técnicas, somos capaces de analizar las inversiones, desde un punto de vista técnico, analizar bien las tecnologías, y ser capaces de evaluar los datos obtenidos en los ensayos preclínicos y clínicos antes de nuestra inversión.  Y una vez que hemos invertido, proporcionamos un soporte muy activo y nos involucramos mucho en las empresas en las que hemos invertido, proporcionando soporte tanto tecnológico como regulatorio para avanzar en la aprobación y la consecución exitosa de estas terapias.  

- ¿Cuál es el principal objetivo de este fondo? ¿Tienen fijada alguna rentabilidad objetivo?

Desde el punto de vista de la rentabilidad, el equipo de inversión de Discovery Ventures ha generado más de 2.000 millones de euros de retorno para nuestros inversores a lo largo de los últimos 15 años, con un múltiplo de 4,5 veces el capital inicial invertido. Para este fondo, nuestro objetivo de inversión es multiplicar por cuatro la inversión inicial y tener una rentabilidad anualizada del 35%. 

- El equipo de Discovery ya ha hecho varias inversiones, ¿podría contarnos algún caso de éxito?

Hay un par de casos de éxito que vale la pena reseñar. Uno de ellos es una inversión en Qutera, donde multiplicamos por 80 el valor inicial de la inversión en solo tres años.  Y básicamente esta empresa consiguió regenerar el nervio óptico, el tejido neuronal, y esto tiene unas implicaciones muy importantes para la potencial cura de enfermedades como el Alzheimer, el Parkinson o el glaucoma. Otra empresa muy importante que vale la pena destacar es Genesight. Esta empresa tiene una terapia génica y con una sola inyección es capaz de curar la ceguera en niños que desarrollan una forma de ceguera anteriormente sin cura que se desarrolla en la adolescencia. Este es un caso de éxito muy importante de nuestro equipo.

- En resumen, ¿por qué sería aconsejable invertir en este vehículo?

Es una buena oportunidad para multiplicar cuatro veces el capital inicial invertido en el fondo. Junto a esto, otro aspecto muy interesante es la fiscalidad del vehículo. Al ser un FCR radicado en España hay unas exenciones fiscales muy ventajosas para el inversor, lo que permite incrementar los beneficios del mismo. Y para terminar, algo que es también esencial de nuestro ADN, es el impacto social positivo. Somos un artículo 9, intrínsecamente somos este artículo por lo que hacemos, que es buscar la cura de enfermedades graves, altamente debilitantes que a día de hoy no tienen cura y que afectan a grandes segmentos de la población. Y para ello nos medimos por dos criterios fundamentales, que es la mejora de la calidad de vida del paciente y el incremento de la esperanza de vida de los pacientes.