La guerra de divisas es una guerra de cuatro monedas, el euro, dólar yuan y yen. Una guerra que comienza en 2008 cuando China decide mantener artificialmente baja su divisa, consiguiendo abaratar las exportaciones y fomenta que las empresas extranjeras se vayan a China a producir y consumir sus productos, lo que incrementa sus reservas.

El secreto de China es mantener el tipo de cambio bajo, aunque lo subió en 0.25% lo hizo para luchar contra la inflación y el problema inmobiliario. Además quiere incrementar sus exportaciones e incrementar el superávit comercial. Además el gobierno chino ha decidido diversificar sus reservas (mediante la inversión en yenes) y hacer bonos en su propia divisa, en yuanes, para hacerle más fuerte.

En el euro-dólar está alcista. SE está devaluando el dólar porque interesa a la FED y el euro está apreciado como efecto de la devaluación del resto de divisas. No es buena esta apreciación porque segenera un problema de confianza. Técnicamente se batió el primer soporte en 1.3770 que le he llevado a fijarse en un nuevo mínimo de reacción en los 1.3696. Si este gráfico lo comparamos con el del franco suizo-dólar hay una gran divergencia “y hasta que no rompa los 0.9690 – tanto diario como mensual- podemos hablar de una pequeña reacción. Pero mientras tanto el par está alcista”.

El dólar-yen es probable que caiga a niveles del 95. Aunque el gobierno japonés ha intentado crear sus propias medidas de Quantitative Easing pero si el yen se acerca a esos niveles, es posible que el BoJ intervenga el mercado de forex. Técnicamente lleva 23 jornadas consecutivas sin cerrar por encima de la vela precedente. El resto de las velas se mueven entre sus máximos y sus mínimos “y mientras no cierre por encima de 82, seguirá cayendo”. La señal de compra se dará sólo si supera estos 82 yenes.