La media móvil simple da importancia a los datos históricos mientras que la exponencial le da más importancia a los datos más recientes. La exponencial va más pegada al precio mientras que la simple dará menos entradas y salidas falsas, con lo que es una de las que se suele utilizar.

Lo que realmente es útil a la hora de utilizar las medidas móviles es el ajuste que cada uno tenemos que hacer en nuestro espacio temporal a trabajar. El peor enemigo de la media móvil son los movimientos laterales.

En el gráfico, se muestra un activo con dos medias móviles: una bastante rápida (35 sesiones) y otra de 200 sesiones, más lenta. Este tipo de estrategias se utilizan en el medio plazo e inicialmente se utilizarían cuando la media de 35 sesiones corta de abajo a arriba la de 200 sesiones. En este caso seríamos compradores del indicador.  

En base a esto, lo que está claro es que si fuéramos solamente inversores de media móvil, la señal que cortara de arriba a abajo nos haría vendedores y a partir de ese momento, estaríamos vendidos hasta que volviera a cortar de abajo a arriba. Esto funciona cuando el precio se mueve y no está lateral.

También se pueden utilizar las medias móviles como soportes y resistencias. En este tipo de medio y largo plazo, la media móvil de 200 sesiones simple  - para que los datos históricos sean más fiables – nos puede ayudar para ser soporte.