Después de un año como el 2022 y después de dejar atrás un verano especialmente complicado para los mercados, ¿en qué punto ves a Europa desde el ángulo de crecimiento y valoración? ¿Se ha abierto una ventana de oportunidad?

Efectivamente nosotros en Europa vemos una ventana de oportunidad que está guiada por dos factores principales. El primer factor es que en el año 2022 hemos tenido la subida de tipos más agresiva en Europa de los últimos 50 años y eso evidentemente ha traído un de "derating" matemático de las valoraciones de las compañías; las valoraciones -por lo menos desde nuestro punto de vista y desde nuestra cartera- han caído un 50% más o menos desde picos de 2021. Se trata de una realidad matemática que hoy, con estos niveles de tipos de interés, tenemos valoraciones muy ajustadas y otras en terreno atractivo. En Europa, y en Lonvia principalmente más enfocado al segmento de pequeñas y medianas capitalizaciones, por valoración hay una oportunidad clara desde un punto de vista cuantitativo. Pero, por otro lado, esa ventana de oportunidad es aún más evidente cuando vemos la calidad de los modelos de negocio. Con el Covid, desde el año 2020, y su consiguiente lockdown (aislamiento), muchas de nuestras compañías y sectores en los que estamos invertidos en Europa han salido reforzados, porque cuando tienes reinversión de beneficios netos en I+D, en innovación, en digitalización, en atracción de talento... evidentemente tus compañías van reforzando las barreras de entrada de forma estructural en el tiempo. Y eso es lo que ha sucedido con nuestra cartera. La calidad del fondo Lonvia Avenir Mid-Cap Europe y de nuestro portfolio no se ha resentido, ni siquiera por un entorno de tipos más complicado (más altos). En definitiva, en Europa desde Lonvia Capital vemos oportunidades de un punto de vista cuantitativo por valoración y desde un punto de vista cualitativo también, porque tenemos nichos de mercado que compiten de forma global contra otras economías del mundo: innovación digital, ciberseguridad, tecnología médica, semiconductores, automatización de la industria, etc., en los que hay compañías de pequeña y mediana capitalización que se convertirán seguramente en esos campeones globales del mañana. 

Y desde un punto de vista de desempeño operativo, ¿cómo están funcionando las compañías que tiene LONVIA Capital en cartera? ¿Cómo está lidiando la cartera con la ralentización económica que ya ha descontado el mercado en gran medida?

Ahora tenemos otro factor geopolítico sobre la mesa: el conflicto de Israel y la franja de Gaza. Desde hace 18 meses estamos lidiando con factores exógenos sobre los que no tenemos ningún tipo de control, pero la buena noticia es que nuestras compañías han sido capaces de seguir su senda de crecimiento empresarial sin depender de esos factores exógenos. Esto no quiere decir que seamos inmunes o que no haya una ralentización económica en curso, sino que creemos que esa ralentización ha sido ya descontada en gran medida por los mercados. Evidentemente las caídas de este pasado verano han sido muy agresivas y el mercado sigue con más volatilidad. Además, ahora tendremos unos días o semanas por delante de incertidumbre. Pero, desde un punto de vista microeconómico fundamental, que al final es lo que nosotros controlamos y lo que podemos trasladar a nuestro inversor como convicción, nuestra cartera sigue creciendo en términos de beneficio por acción por encima del 20% según datos de finales de septiembre, y nuestra cartera sigue generando márgenes sobre EBITDA por encima del 25%. Y eso significar tener compañías con poder de fijación de precios ante un entorno de inflación, tipos altos y geopolítica complicada, es decir, empresas que van a navegar de forma exitosa un entorno como el actual. Pero, además, se trata de empresas que han venido haciéndolo bien durante los últimos 15 años de historia. En definitiva, calidad, innovación y crecimiento estructural está siendo para nosotros en el segmento de pequeñas y medianas capitalizaciones un entramado de características que nos está permitiendo construir una cartera con muchísimo potencial para los próximos meses.

¿Qué podemos esperarnos para este último trimestre del año?

Es difícil responder a las previsiones para el tercer trimestre en el corto plazo, porque generalmente los mercados son ineficientes. Lo que ocurre es que esta ineficiencia o distorsión que tenemos entre performance operativa de la cartera y rentabilidad de mercado (de hecho, nuestra estrategia está negativo en el año cuando sus crecimientos en beneficios están por encima del 20%) en algún momento tiene que tender a cerrarse. Desde Lonvia no estamos diciendo que los beneficios empresariales estén disparados; de hecho, ya han corregido, pero han corregido de una forma mucho menos agresiva que otras compañías, por las características de las empresas que avalan la calidad de nuestra cartera -poder de fijación de precios, barreras de entrada y poca o cero deuda-. En ese sentido, para los próximos trimestres creemos que hay una oportunidad, pero se para aquel inversor de medio largo plazo que que tenga un horizonte temporal no de 12-18 meses, sino de 3-5 años. Empíricamente está demostrado que el segmento  de pequeñas y medianas capitalizaciones (y en nuestro caso europeo) bate con creces a grandes capitalizaciones y es un generador de alfa estructural en la cartera. Con lo cual, en el corto plazo difícil respuesta pero en el medio plazo, para quien pueda ir posicionándose con valoraciones mucho más atractivas y con una calidad de cartera consolidada y verificada, hay una ventana oportunidad.