El moviendo bajista tan fuerte podría estar encontrando un primer soporte en 1.190, aunque el soporte más importante son los 1.070 dólares. Para entrar largos tenemos que esperar una reacción muy fuerte aún.

El West Texas tiene todavía posibilidades de seguir subiendo y parece que está intentando romper resistencias. Hasta que no las rompa, no podemos asegurarlo, aunque tienen una fortaleza importante y podría terminar el año muy alcista. El WTI tiene una fuerte resistencia, pero podríamos verlo en los 103 dólares por barril, ó incluso, en los 110 dólares.


El Brent está tocando niveles de soporte importantes que podría permitir, no obstante, rebotes interesantes para recuperar valor hasta los 109 dólares el barril.

En el euro-dólar no tenemos una perspectiva alcista. Las correcciones deben venir y podríamos ver una aproximación hasta los 1,25 dólares. No creemos que llegue a este nivel de un tirón, por lo que habría que operar más en marcos diarios.
Técnicamente, los niveles a tener en cuenta son los 1,2750, primer objetivo bajista, y los 1,2530. Para hablar de compras, deberíamos ver superar los 1,3370 dólares.

La tendencia para el medio plazo del dólar-yen es alcista. Durante dos o tres semanas creo que veremos movimientos alcistas importantes, aunque creo que tendremos más meses de consolidación. Para inversiones a largo plazo no es momento. Mejor operar en intradía y marco diario, a lo sumo. Tras una subida muy vertical, nos ha dado una señal en junio, como una cola de absorción, que estaría avisando de que vienen lateralidades y algunas subidas adicionales antes de que se presente la corrección.

La tendencia de Wall Street es sumamente alcista, pero no lo veo sostenible en el segundo semestre. En el corto y medio plazo la tendencia si es alcista. Veo poco probable que continúa el rally, pero se complica la cosa para ponernos cortos de momento.
En el Dow Jones la subida ha sido muy vertical, aunque la tendencia se va despegando de su ángulo de 45º. Es probable que tengamos 3-4 meses de consolidación para luego ver una corrección más pronunciada. Si alguien tiene una inversión normal, no apalancada, a largo plazo, puede permanecer tranquilo.