No es ninguna novedad que le diga que el precio se mueve en tendencias y que éstas pueden ser direccionales (alcistas o bajistas) o laterales. Los rangos laterales se forman en forma de pautas, ya sean de continuación o de cambio de tendencia, que forman zonas de acumulación o distribución según el momento del ciclo económico. Si analizamos más al detalle el precio, podemos afirmar que éste se mueve por impulsos y correcciones, que juntos definen la dirección de la tendencia, en función de las sucesiones de máximos y mínimos.

Comprender perfectamente el movimiento del precio es básico en la operativa, puesto que si conocemos el movimiento tipo del precio, podemos aplicar de forma correcta nuestro sistema de Trading, comprendiendo las fluctuaciones de dicho precio como un reflejo de las emociones que desprendemos los operadores, así como la lucha que cada Trader necesita ganar contra sí mismo y no contra el mercado. El mercado es lo que es, ¡un mercado! Nosotros simplemente formamos parte de él y tenemos que aplicar modelos de Trading para tratar de maximizar nuestros beneficios y minimizar siempre las operaciones perdedoras.

Durante estas semanas, la comunidad técnica se ha debatido entre si es posible ver un mercado alcista en el IBEX 35, mientras la bolsa americana se desploma. Las dudas vienen dadas por la enorme burbuja de la bolsa estadounidense y la más que probable retirada de estímulos por parte de la FED. Sin embargo, mientras el debate alimenta de dudas nuestra operativa, yo trato de aferrarme más que nunca a mi idea; ¡el precio manda!

En mis últimos artículos he venido defendiendo mis preferencias a la hora de operar y siempre trato de ir a la contra, de hecho es una de las mejores estrategias de Blackbird, en la que sin duda somos pioneros. Buscar arranque a la contra o continuación de tendencia en las pauta correctivas, forma parte de la filosofía de un Trader, pues al fin y al cabo buscamos tendencias y éstas, sean de corto, medio o largo plazo se forman por estados anímicos, fruto de las diferentes emociones que un Trader experimenta en cada operación.

Cuando empezábamos a operar, nos fijábamos en el precio y a veces tratábamos de perseguirlo, comprando en las fugas de un modo impulsivo, bajo el pretexto erróneo que se explica en muchos libros de Trading, donde se expone que las rupturas de resistencia son puntos de compra. El trader actual, nace con un claro prejuicio y trata de aplicar el análisis chartista en gráficos de muy corto plazo. El chartismo fue creado alrededor de 1.950, momento en el que no existían las plataformas de Trading y el chartista tenía que dibujar los gráficos, para comprender el estado anímico del operador y definir la línea de menor resistencia, en función de los máximos y los mínimos. Actualmente, las facilidades en la graficación permiten a muchos Traders el uso de osciladores y herramientas avanzadas, pero por más que tratemos de simplificar el proceso, el resultado sigue siendo el mismo; las pérdidas.

Para evitar las pérdidas continuadas y la descapitalización en el mercado, el Trader necesita aprender técnicas de gestión monetaria y controlarse emocionalmente, puesto que el ruido del mercado afecta sobremanera al operador y el análisis técnico de corto plazo, pierde fiabilidad, al dar múltiples señales, la mayoría falsas bajo mi experiencia.
Un Trader debería plantearse si es capaz de perder una cantidad específica de dinero y si la respuesta es afirmativa, debería a su vez preguntarse ¿qué sucedería si perdiera 5 veces consecutivas dicha cantidad? Probablemente se sorprenda al leer esta afirmación, pero a veces pasamos por rachas y las rachas perdedoras existen con una implicación que va mucho más allá de la pérdida y es la falta de confianza. Como analistas, tratamos de comprender el precio y plantear hipótesis con sentido. Pero a veces nos aferramos a la esperanza con un apego emocional que sólo hace referencia a nuestro ego, que nos produce ansiedad mientras el precio no nos da la razón y arrepentimiento si las cosas no suceden como habíamos previsto. La primera vez que leí al gran Kostolany, no comprendía aquello de que en la bolsa 2+2 es igual a 5-1, pero a medida que pasan los años, y las veces, me doy cuenta que en el Trading las cosas suceden tarde o temprano y que simplemente hay que perseverar con mucha convicción, hasta que sucede lo que debería de haber sucedido. Este hecho, provoca malestar en muchos operadores, ya que ver como una operación se enfila en una imponente tendencia, tras habernos producido el dolor de la pérdida, es desmotivador y a veces causa por la que dejamos el mercado durante unos días, incluso semanas.

Un verdadero Trader, no debería desesperar. Buscamos patrones de Trading en el largo plazo, para encontrar puntos de entrada basados en el ciclo económico. La mayor fiabilidad del análisis económico, nos permite comprender el entorno y buscar ideas con sentido económico. Nuestro entorno es el mercado de capitales y vivimos en la incertidumbre. La pérdida forma parte de nuestro oficio y hay que saber gestionarla, ¡siempre! La tendencia manda y es meramente un suceso que podemos buscar. La perseverancia nos ayuda a estar en el momento y lugar adecuados y la convicción nos da el coraje necesario para seguir persistiendo mientras sufrimos fracaso tras fracaso. En el mercado las circunstancias suelen extrapolarse y la lucha contra uno mismo es puro capital.

Cuando observamos un rango lateral tras un impulso alcista, miramos con recelo la subida dudando si la pauta plana es de continuación o de giro. Si es de continuación buscamos comprar y si es de giro vender. Si vendemos deberíamos buscar una entada en la parte alta del rango, pero el precio suele desafiar a los bajistas con ataque a la resistencia que nos produce miedo y el miedo nos paraliza el tiempo suficiente como para ver como dicho precio se desliza en busca del soporte. Esta inacción, nos lleva al arrepentimiento que nos puede a su vez conducir a tomar una decisión impulsiva, entrando en el mercado en Break Out, y éste puede ser real o falso. Pero es cierto, la mayoría de Break Outs son falsos y por lo tanto, si tratamos de alinear la estadística con el Trading, deberíamos ir a la contra para tener la ventaja de nuestro lado.

Esta explicación me sirve para exponer de algún modo, la decisión que desde Blackbird hemos defendido durante los últimos meses. ¡El IBEX 35 está en tendencia alcista y el Dow Jones en una fase de distribución que podría ser algo más que una corrección! Hoy más que nunca, me reafirmo en mis ideas y seguiré apoyando a los alcistas españoles y me anticiparé con algunos bajistas que tratan de buscar, en la sobrevaloración de los precios, argumento suficiente como para pensar en el comienzo de algo más que una corrección. Las divergencias sectoriales, la creciente actividad de operaciones de M&A, las IPO, la retirada de estímulos de Bernanke y la subida de rentabilidad en el bono americano de largo plazo, son factores nada desdeñables y que me animan a tener más convicción si cabe, en mis ideas.



Y aquí sigo, bajista en el Dow Jones en una idea que propuse en nuestras notas de análisis y en la cual seguimos persistiendo el 17.09.2013, día que Bernanke anunció la continuación de sus políticas de expansión monetaria. Buscar arranque a la contra es complejo y traté de buscar una operación en 4 ocasiones, el resultado final son dos operaciones en Break Even, una operación con pérdidas limitadas y una operación muy ganadora. Análisis correcto pero insuficiente, acompañado de la actitud necesaria para seguir intentándolo cuando las cosas no acompañan y con la seriedad suficiente para seguir mi plan de Trading a medida que el mercado se encarga de darme respuestas.



Y aquí tenemos las respuestas, a la tan ansiada pregunta. El IBEX 35 se ha descorrelacionado definitivamente de la bolsa americana marcando técnicamente una pauta impulsiva, que ha sido acompañada de una importante corrección del Dow Jones. Ahora, muchos analistas podríamos preguntarnos si tras la pauta correctiva del DJIA, podríamos ver una continuación del impulso alcista del selectivo español como consecuencia de un buen tono en Wall Street.

Pero así es el mercado, escapa de toda razón y de todo argumento, pues al fin y al cabo, el mercado es dominado por la emoción y las emociones nacen de los más profundo de nosotros y como dijo Pascal; ¡el corazón tiene razones que la razón no entiende!