Las medidas en materia tributaria aprobadas por el Gobierno para atajar la subida de la electricidad y su impacto en la factura de la luz han ocasionado una reducción de 3.289 millones de euros en la recaudación desde su puesta en marcha el año pasado hasta febrero.

Así se desprende del informe mensual de recaudación tributaria correspondiente al mes de febrero y publicado esta semana por la Agencia Tributaria, en el que se recoge el impacto de la rebaja de los tipos en la electricidad aprobada por el Gobierno, que se ha prorrogado hasta el 30 de junio.

Solo en los dos primeros meses del año, las medidas fiscales para atajar la escalada del precio de la electricidad supusieron una reducción de ingresos de 1.684 millones, de los que 647 millones corresponden a la rebaja de tipos impositivos y 1.037 millones a la suspensión del Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica correspondiente al cuarto trimestre de 2021.

En cuanto a la rebaja de tipos, el impacto en las cuentas públicas en los dos primeros meses del año fue de 332 millones menos por la bajada del tipo del IVA desde el 21% al 10% a los consumos domésticos, y de 315 millones por la disminución del tipo desde el 5,11% hasta el 0,5% en el Impuesto sobre la Electricidad.

El Gobierno ha aprobado la extensión de estas medidas hasta el próximo 30 de junio, lo que elevaría el impacto total en la recaudación a 7.000 millones de euros, según los cálculos de la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.

Ante las incertidumbres causadas por la guerra en Ucrania y la escalada de los precios, sobre todo los relacionados con la energía, el Gobierno no ha descartado seguir adaptando las medidas a lo largo del año para paliar las consecuencias del conflicto.

Según el Ejecutivo, prorrogar las medidas fiscales relacionadas con la electricidad durante todo 2022 supondría un coste para el Estado de entre 10.000 millones y 12.000 millones de euros.

Ahora, el objetivo del Gobierno es negociar con la Comisión Europea "el precio más bajo posible" para el gas, con el fin de abaratar de forma significativa el precio de la electricidad. Para ello, España y Portugal han presentado una propuesta preliminar a la Comisión Europea que establece un precio de referencia para el gas de 30 euros el megavatio/hora (MWh).

Los analistas del Banco Sabadell consideran que esta propuesta preliminar podría reducir el precio medio del mercado mayorista de electricidad a unas cifras de entre 120 y 130 euros el megavatio/hora (MWh).

De salir adelante dicha propuesta, supondría una considerable rebaja sobre los precios actuales de la electricidad, habida cuenta de que en lo que va de año el precio medio del mercado mayorista se ha situado en 229,27 euros, más del doble que en 2021, que fue el más caro de la historia con 111,93 euros/MWh en promedio.