En concreto, se había fijado un objetivo de colocación de bonos y obligaciones por un importe mínimo de 3.000 millones y un máximo de 4.000 millones de euros para las cuatro referencias de la subasta.
En los bonos a 5 años, el Tesoro ha colocado 1.381,3 millones de euros, con una demanda de 2.726 millones y con un cupón del 0,75%. El Tesoro ha logrado colocar este importe con un tipo de interés marginal del 0,163%, frente al 0,175% de la subasta anterior, celebrada el pasado 4 de agosto.

Asimismo, el organismo adscrito al Ministerio de Economía ha adjudicado 1.326,4 millones de euros, con una demanda de 2.856 millones de euros y con cupón del 1,3%, en las obligaciones a 10 años. En este caso, el tipo de interés marginal se ha situado en el 1,138%, por encima del 1,104% registrado en la subasta anterior del pasado 1 de septiembre.
Por último, el Tesoro ha colocado también 1.175,2 millones de euros en obligaciones a 15 años, frente a los 1.490 millones solicitados, y un cupón del 1,95%. El tipo marginal ha sido del 1,463%, inferior al 1,531% previo de la subasta del 7 de julio. El pasado martes el Tesoro subastó letras a seis y doce meses y logró captar 4.570 millones de euros, en el rango medio previsto.
La última subasta deja signo mixto. "La incertidumbre sobre los próximos movimientos de los bancos centrales contribuye a aumentar los intereses exigidos a parte de la deuda española", opina Javier Urones, analista de XTB. "Las caídas de estas últimas sesiones en bolsa están provocando que los bonos soberanos de países periféricos como el de España, vean incrementada su prima de riesgo frente a deuda como la alemana o la francesa en Europa. La decisión la semana que viene de tipos de interés en Estados Unidos sigue siendo el principal foco de atención para el mercado. Las probabilidades de subida de tipos son remotas, de hecho no alcanzan el 20%, pero los inversores seguirán esta cita muy atentos para tratar de calibrar en que mes puede producirse esta subida", agrega el experto.