El Grupo Cajastur durante el año 2009 reforzó su solvencia, al haber aumentado su nivel de recursos propios de máxima calidad (core capital) en más de 2 puntos hasta alcanzar el 12,70 por ciento, y consolidó su posición de liderazgo en el sector en rentabilidad sobre activos totales medios (ROA), manteniendo esta ratio por encima del 1 por ciento pese al difícil entorno económico. La Asamblea Ordinaria de Cajastur, celebrada en Oviedo el 13 de abril, aprobó las cuentas del año 2009, ejercicio en el que obtuvo un beneficio neto atribuido de 165,7 millones de euros.

Durante el ejercicio 2009 el Grupo Cajastur elevó su "core capital" desde el 10,55 por ciento de final del año anterior hasta el 12,70 por ciento, consolidándose como una de las entidades financieras españolas líderes en solvencia, duplicando las exigencias legales de recursos propios mínimos. Asimismo, la entidad mejoró en 3,39 puntos la ratio de solvencia, que aumentó desde el 12,71 por ciento hasta el 16,10 por ciento.

En las Asamblea Ordinaria se informó de que la adecuada gestión de los márgenes, la positiva aportación de la cartera de valores y la mejora de la eficiencia, permitieron que en un entorno económico de recesión el Grupo Cajastur triplicase los fondos de provisión manteniendo la rentabilidad sobre activos (ROA) por encima del 1 por ciento (1,07%), con una leve caída del resultado neto atribuido de un 6,91 por ciento, y consolidando su posición de liderazgo en rentabilidad y duplicando el ROA medio en el sector financiero español.

El Grupo Cajastur intensificó las acciones de reducción de costes de administración y de mejora de la eficiencia, logrando el grupo consolidable de entidades de crédito una reducción de los mismos del 7,8 y del 1,18 por ciento el grupo económico, lo que ha supuesto una mejora de 7,14 puntos de la ratio de eficiencia financiera, que se situó en el 32,69 por ciento.

Las dotaciones a fondos de provisión aumentaron un 214 por ciento, disponiendo así de un volumen de fondos para la cobertura de distintos riesgos por importe de 337,8 millones de euros, de los que 164 millones (48,5%) son de carácter voluntario y extraordinario. Cajastur, mediante la adecuada gestión del riesgo de crédito de su cartera de activos de elevada calidad, logró que la morosidad tuviera un moderado aumento, al situarse en una tasa del 3,23 por ciento, entre las más bajas del sector, y ello a pesar de haber elevado significativamente el volumen de riesgos clasificados dudosos por criterio subjetivo, en aplicación de la prudencia aconsejable en un entorno económico adverso como el actual. El Grupo Cajastur alcanzó una cifra de negocio 23.013 millones de euros, con una leve disminución del 1,05 por ciento, debido al crecimiento de la inversión crediticia bruta del 0,24 por ciento, que en el caso de las familias supuso un aumento del orden del 8 por ciento, y a la disminución de los recursos captados de clientes en balance del 2,16 por ciento, mientras que los fondos de inversión y pensiones registraron un aumento superior al 19 por ciento. Cajastur mantiene una holgada posición de liquidez, de 3.048 millones de euros, un 20 por ciento sobre activos.